La atroz masacre perpetrada en un pueblo sirio, el martes pasado, utilizando armas químicas que ocasionaron la muerte a decenas de civiles, entre ellos muchos niños, tiene que ser investigada y condenada como el acto terrorista que es, y por el que deben pagar sus responsables, cuyo rastro tarde o temprano saldrá a la luz.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Repudio contundente a cualquier acto de terror
Nota de archivo
Esta historia fue publicada hace más de 7 años.