No aparenta los 59 años de edad, su capital es sobre $3,300 millones, revolucionó el mundo cibernético con programas prácticos de interacción, es productor de películas y de TV, pero su mayor vitrina la ha conseguido por ser dueño de los Mavericks de Dallas, que adquirió de manos de Roos A. Perot en el año 2000, siendo el más controversial de los propietarios por sus críticas a la liga que le coronan en pago de multas.