Es momento de que el Fideicomiso de Energía Verde haga acto de presencia inmediato y se encargue de gestionar aquellos proyectos que intentan establecer de una vez la energía renovable en la isla, escribe María Alejandra Castillo
Es momento de que el Fideicomiso de Energía Verde haga acto de presencia inmediato y se encargue de gestionar aquellos proyectos que intentan establecer de una vez la energía renovable en la isla, escribe María Alejandra Castillo
Hablando de fuentes de energía renovable, Puerto Rico lo tiene todo. El sol nos sobra, el viento sopla constantemente y el agua nos rodea. Además, espacio de sobra hay para colocar cuantiosas placas solares para encender a todo Puerto Rico. Solo imagínense. ¿Cuánta energía produciría el techo de Plaza Las Américas si se cubriera de placas solares? Concuerdo con la postura de ambientalistas de no sacrificar terrenos fértiles para la instalación de las llamadas fincas solares. En ese sentido, el recurso techo también nos sobra. La dependencia del sistema energético basado en el recurso fósil nos aleja demasiado de nuestro potencial de producción energética.
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