El empresario ha expandido el negocio con visión
El empresario ha expandido el negocio con visión
Hace más de 41 años, un joven empresario ponceño llamado Juan Marroig, recién graduado de la universidad, se unió a Alejandro Ithier para formar lo que hoy en día conocemos como Progreso Cash & Carry, en Ponce.
En 1979, y con una oferta estrictamente de venta al por mayor, Progreso Cash & Carry se fue posicionando en el mercado y ganando una base fiel de clientes. Lo que comenzó siendo un local en la calle Villa, con un espacio de cuerda y media de terreno y 10 mil pies de edificación, en unos años triplicó esa cantidad.
Cuando Alejandro Ithier toma la decisión de retirarse, le vende la totalidad de sus acciones a Juan Morroig. Este tuvo la idea de seguir creciendo y expandiendo el local. Su visión de negocio, su deseo de estar a la vanguardia y su capacidad de ajustarse a los nuevos estilos y necesidades de sus clientes convirtieron a Progreso Cash & Carry, Inc. en la primera opción de pequeñas empresas y del público en general en el área sur de Puerto Rico.
Cada emprendedor traza su propia ruta al éxito y Progreso Cash & Carry es el fruto del trabajo duro, la constancia y la resiliencia de una empresa netamente puertorriqueña que se atrevió a soñar en grande, creando empleos, elevando el nivel de vida de más de 90 familias, alimentando nuevas ideas, apoyando a su comunidad y generando crecimiento para los empresarios del área sur, y que actualmente cuenta con el apoyo y la ayuda de su familia. Su hijo, como su mano derecha en la empresa, así como su yerna, su hija y sus nietos, también laboran mano a mano en el desempeño del negocio, dispuestos a ayudar al comerciante y a la clientela que los visita.
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