A poco más de seis años de haberse firmado el primer acuerdo entre Energy Answers y una dependencia pública, el proyecto de conversión de desperdicios sólidos a energía (“waste to energy”) que la empresa propone para Arecibo parece estar ahogado en burocracia, hecho que para sus opositores es señal de que “la incineradora no va”.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Seis años de tropiezos para la incineradora de Arecibo
La planta de Energy Answers está estancada en burocracia y su puesta en marcha luce cada vez más incierta
Nota de archivo
Esta historia fue publicada hace más de 9 años.