:format(jpeg):focal(1018x378:1028x368)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gfrmedia/4SEF3I34QZCJ5NZ2QQJT2MPFDE.jpg)
Charlie Ronda comenzó su vida como comerciante vendiendo guantes de béisbol desde el baúl de su carro a las afueras de los parques de pelota. Junto a su esposa, Vivianna Quijano, viajaban buscando parques que estuvieran iluminados con la promesa de poder vender su mercancía.