Nota de archivo: este contenido fue publicado hace más de 30 días.

Iván González, izquierda, junto a su cuñado Gabriel Martínez ayudan a un conductor para sacar su carro utilizando una alfombra en Austin, Texas.
Iván González, izquierda, junto a su cuñado Gabriel Martínez ayudan a un conductor para sacar su carro utilizando una alfombra en Austin, Texas. (The Associated Press)

Es como si el mundo se hubiera puesto patas arriba, o al menos su clima. Puede culpar al cada vez más familiar vórtice polar, que ha traído el sabor del Ártico a lugares donde el invierno a menudo no requiere más que un abrigo.

💬Ver comentarios