:format(jpeg)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gfrmedia/HD7S25GDLBAFHA75KGQFNIGSL4.jpg)
Toronto - Canadá reingresó a un renovado acuerdo de libre comercio de América del Norte con Estados Unidos y México la noche del domingo después de varias semanas de negociaciones ante un plazo que vencía a la media noche.
En un comunicado conjunto, el representante comercial estadounidense Robert Lighthizer y la canciller canadiense Chrystia Freeland dijeron que el acuerdo “fortalecerá a la clase media, y generará empleos bien pagados y nuevas oportunidades para las casi 500 millones de personas para las que Norteamérica es su hogar”.
El nuevo pacto, concretado justo antes de la fecha límite impuesta por Estados Unidos, se llamará Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá. Reemplaza al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) de 24 años de vigencia y al que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha descrito un desastre asesino de empleos.
El pacto concretado el domingo les otorga a los granjeros estadounidenses un mayor acceso al mercado lácteo de Canadá. Pero también mantiene el proceso de resolución de disputas del TLCAN que Estados Unidos quería disolver, y le ofrece a Canadá protecciones en caso de que Trump quiera proseguir con sus planes de imponer aranceles a los coches, camiones y autopartes importadas hacia Estados Unidos.
“Es un buen día para Canadá”, declaró el primer ministro, Justin Trudeau, al salir de su oficina. Añadió que diría más el lunes.
“Celebramos el acuerdo trilateral. Se cierra la puerta a la fragmentación comercial de la región”, dijo Jesús Seade, negociador comercial en representación del presidente electo de México, a través de una publicación en Twitter.
Representantes del gobierno del presidente electo Andrés Manuel López Obrador convocaron el lunes a una conferencia de prensa para discutir los detalles del nuevo pacto comercial.
Canadá, el segundo principal socio comercial de Estados Unidos, había sido excluido del acuerdo que Estados Unidos y México alcanzaron en agosto para reformar el TLCAN.
El gobierno de Trump notificó oficialmente al Congreso sobre el acuerdo comercial México-Estados Unidos el 31 de agosto. Ello dio inicio a un periodo de 90 días que permitiría al presidente saliente de México, Enrique Peña Nieto, firmar el nuevo acuerdo antes de que concluya su mandato el 1 de diciembre.
Trump amenazó con proseguir con un renovado TLCAN, con o sin Canadá. Se desconoce, sin embargo, si Trump tenía la autorización del Congreso para firmar un acuerdo exclusivo solo con México.
Algunos legisladores no tardaron en expresar su alivio de que Canadá reingresara al bloque comercial regional.
“Me complacer que el gobierno de Trump haya llegado a un acuerdo para modernizar el TLCAN con México y Canadá”, dijo el presidente de la Comisión de Finanzas del Senado, Orrin Hatch. “El TLCAN ha demostrado su éxito”.
El TLCAN eliminó la mayoría de las barreras comerciales entre México, Estados Unidos y Canadá, lo que generó un incremento en el comercio entre las tres naciones. Pero Trump y otros detractores señalaron que alentaba a los fabricantes a trasladarse al sur de la frontera para aprovechar los bajos salarios en México, lo que representaba una pérdida de empleos en Estados Unidos.
Trump hizo campaña bajo la promesa de reescribir el TLCAN o deshacerse por completo de él. Las pláticas de renegociación comenzaron hace más de un año. Para apaciguar a Trump, México accedió en agosto a cláusulas que requerirían que entre el 40 y el 45% de un auto se construyeran en países en donde los trabajadores recibieran un sueldo mínimo de 16 dólares por hora para ser elegibles a los beneficios de libre impuesto del TLCAN.