El aumento del CRIM propuesto en el plan del Gobernador ciertamente ha alarmado al País por lo perjudicial que será para más de 1 millón de hogares puertorriqueños. Pero ese no ha sido el único efecto de la propuesta, ya que además ha levantado una vez más la discusión sobre la crítica situación fiscal de los municipios. Los gobiernos municipales tienen sobre $3,800 millones en deuda financiera, poco más de $2,000 de estos al Banco Gubernamental de Fomento. Además, son uno de los principales patronos participantes del Sistema de Retiro de Empleados Públicos, el que será modificado para convertirlo en uno “pay as you go”. Ese cambio impactará el flujo de efectivo de los ayuntamientos al requerir de estos el pago mensual sin dilación para costear las pensiones de sus empleados. Durante los últimos años, los municipios han enfrentado retos similares a los del gobierno central al ver reducidos sus recaudos y perder acceso a fuentes de financiamiento.
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Alcaldes acorralados
Una reflexión sobre la eliminación de los subsidios a los municipios y el aumento en el CRIM, como asesinos silenciosos en las alcaldías es presentada por el representante Jesús Manuel Ortiz.