Nota de archivo: este contenido fue publicado hace más de 30 días.

El asma no tiene cura, pero sí puede controlarse.  (Shutterstock)
Varios estudios han mostrado que el asma y la obesidad comparten algunos factores de riesgo socioeconómicos, conductuales y ambientales. (Shutterstock)

Los adultos con asma tienen más riesgo de desarrollar obesidad, según el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), que especifica que el peligro es más elevado entre quienes padecen asma no alérgica, han tenido la enfermedad durante más tiempo o están en tratamiento con corticosteroides.

💬Ver comentarios