El pasado sábado fueron muchas las emociones en la ciudad de Louisville, donde se llevó a cabo el tradicional Kentucky Derby y resultar ganador Mystik Dan, al superar a Forever Young y Sierra Leone en la sorpresiva victoria.

Desde Puerto Rico también se vivían otras emociones al competir Fierceness, el ejemplar favorito y montado por el miembro del Salón de la Fama de Hipismo, el puertorriqueño John Velázquez, que desafortunadamente quedó rezagado al decimoquinto lugar.

La residencia del expelotero puertorriqueño Carlos Beltrán y su esposa Jessica Lugo, en Dorado Beach East, sirvió para llevar a cabo un encuentro para disfrutar del evento deportivo, a la misma vez que recaudaron fondos que son destinados para la Carlos Beltrán Baseball Academy.

Aunque todavía están finalizando los números, de acuerdo con la directora de la fundación de Carlos Beltrán, Natalia Ferrer, informó a El Nuevo Día que se lograron alrededor de $210 mil en recaudados.

Como dato curioso, la obtención de recaudo mayor fue de 21 mil dólares al venderse como parte de la subasta silente en vivo, el disfrute de una suite en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot para el concierto del exponente urbano puertorriqueño de fama mundial, Bad Bunny.

“Los fondos van destinados a la academia para apoyar becas y transportación que le proveemos a todos los estudiantes de manera gratuita. Los estudiantes vienen de 48 municipios de todo Puerto Rico hasta el pueblo de Florida, donde es la academia y, para lograrlo, tenemos cuatro rutas”, destacó Ferrer.

Según informó, este es el primer evento de recaudación que hacen en la casa de los Beltrán, por lo que no sabían qué esperar, tratándose de evento pequeño en una casa con 130 personas.

“Estamos bien contentos con los resultados porque los gastos fueron mínimos. Nos gastamos 10 mil dólares en el evento y recaudamos 210 mil. O sea, que la inversión fue mínima, pues además nos donaron comida y bebidas”, indicó acerca de la actividad, que contó con diversos auspiciadores, que pagaban taquillas y cada uno tenía su propia lista de invitados, además de vecinos de la familia Beltrán.

“Fueron un éxito los donativos para la subasta silente en vivo. Teníamos una pica allí, como obviamente el motivo era Kentucky Derby, pues lo hicimos para ayudar a levantar fondos a través de esta, que si donabas, pues participabas para ganarte algún premio”, dijo la directora, a la vez que adelantó repetir este y otro tipo de eventos similares “porque a todo el mundo le encantó”.

Durante la tarde, transmitieron en vivo las carreras a través de la pantalla, con la sorpresa de hablar por videoconferencia con el “jockey” puertorriqueño que estaba corriendo ese día.

“Fue emocionante para todo el mundo poder conocerlo antes de que él fuera a correr su carrera, que era lo más importante. Como fue tan bien recibido el evento, creo que lo vamos a repetir el año que viene y con otras integraciones”, agregó.

Del mismo modo, recalcó que la razón principal por la que estaban allí era por los jóvenes que pertenecen a la academia, que incluso había una representación esa tarde, al acudir como voluntarios para ayudar en el evento, siendo parte del registro, la subasta y vendiendo los donativos para la pica.

“Más que nada estaban allí para reconocerlos. Había uno que viaja en guagua de Mayagüez todos los días hasta la academia. Se levanta entre las 3 y 4 de la mañana. Los papás lo llevan a la parada, y está dos horas de ida y de regreso, que con el tráfico a veces toa hasta 3 horas. El compromiso que ese muchacho ha tenido desde que entró a la academia, hace 4 años, todos los días haciendo esa ruta es de admirar. Ese compromiso es el que nos motiva a nosotros a hacer todo todo este trabajo de levantar fondos para apoyarlos a ellos”, puso como ejemplo.