París — Barcelona registró su mes de junio más caluroso desde que comenzaron los registros hace más de un siglo, dijo el martes el servicio meteorológico nacional de España, mientras Europa permanecía bajo el dominio de la primera gran ola de calor de este verano.

El Observatorio Fabra, ubicado en una colina con vista a Barcelona, reportó una temperatura promedio de 26 grados Celsius (78 grados Fahrenheit), rompiendo récords desde 1914. El promedio más caluroso anterior para junio fue de 25.6 C en 2003.

La misma estación meteorológica dijo que el lunes 30 de junio se registró un máximo de 37.9 C (100 F) para un solo día de junio.

Barcelona generalmente se libra del peor calor en España, gracias a su ubicación entre las colinas y el Mediterráneo en la esquina noreste de España. Pero la mayor parte del país ha sido atrapada por la primera ola de calor del año.

Las advertencias de salud estaban vigentes el martes en varios países de la Unión Europea, incluso cuando las condiciones comenzaron a mejorar en algunas partes de la región.

Se pronosticó que las temperaturas extremas alcanzarían los 40 C (104 F) en París y se mantendrían inusualmente altas en Bélgica y los Países Bajos. Por el contrario, las temperaturas estaban bajando en Portugal, donde no se emitieron alertas rojas por calor.

En Francia, la agencia meteorológica nacional Météo-France colocó varios departamentos bajo la alerta roja más alta, y la región de París fue particularmente afectada.

Se espera que la ola de calor, definida como días consecutivos de temperaturas muy altas, se intensifique el martes con más de 1,300 escuelas que cerrarán parcial o totalmente, dijo el Ministerio de Educación.

A los visitantes de la Torre Eiffel sin boletos se les dijo que pospusieran sus visitas, ya que la cima del hito de la ciudad estuvo cerrada hasta el jueves.

Météo-France también advirtió sobre el mayor riesgo de incendios forestales debido al suelo afectado por la sequía, agravado por la falta de lluvia en junio y el reciente aumento de la temperatura.

Los expertos en clima advierten que es probable que los veranos futuros sean más calurosos que cualquiera registrado hasta la fecha. Para 2100, Francia podría ser hasta 4 C (39 F) más cálida, con temperaturas que superen los 40 C esperadas cada año y picos de calor extremos que podrían alcanzar los 50 C (122 F). Según Météo-France, el país podría enfrentar un aumento de diez veces en el número de días de ola de calor para 2100.

Más al sur, 17 de las 27 principales ciudades de Italia estaban experimentando una ola de calor, según el Ministerio de Salud.

Hubo lluvias torrenciales en el norte de Italia el lunes y partes de Bardonecchia, cerca de Turín, quedaron cubiertas de lodo después de que el río Frejus se desbordara. Cerca de Bolonia, una de las ciudades bajo alerta de calor el martes, el propietario de una empresa constructora de 46 años se derrumbó y murió mientras repavimentaba el estacionamiento de una escuela, informó la RAI estatal.

Se estaba realizando una autopsia para determinar la causa, pero se sospechaba del calor. El sindicato CGIL dijo que la muerte del hombre, a quien identificó como Ait El Hajjam Brahim, propietario de Veneto Pavimenti SAS, mostró la necesidad de mejorar las medidas para proteger a los trabajadores de la construcción de la exposición al calor.

Un evento anual en Ámsterdam para conmemorar el fin de la esclavitud en las antiguas colonias holandesas se adelantó para evitar la parte más calurosa del día y en la ciudad norteña de Groningen, los organizadores de un concierto al aire libre con el veterano rockero Neil Young también tomaron medidas, incluyendo la adición de grifos de agua potable adicionales y el suministro de protector solar gratuito.

El instituto meteorológico nacional emitió una alerta por temperaturas extremas y smog en partes del país y advirtió al este de los Países Bajos que podrían estallar tormentas severas el miércoles cuando termine el clima cálido.

En Portugal, se pronosticó que Lisboa alcanzaría los 33 C (91 F), típico para esta época del año, aunque algunas áreas del interior aún podrían ver picos de 43 C (109 F), según la agencia meteorológica nacional. Los récords de temperatura de junio se rompieron en dos lugares de Portugal el 29 de junio.

El servicio meteorológico portugués emitió un comunicado el lunes por la noche confirmando la temperatura más alta jamás registrada en Portugal continental para el mes de junio con 46.6 C el 29 de junio en la ciudad de Mora, al oeste de Lisboa. El récord anterior fue de 44.9 C en 2017.