El monseñor Óscar Arnulfo Romero no pudo tener ni un funeral en paz porque fue saboteado con bombas y balas, un recuerdo doloroso que rememora su hermano Gaspar Romero a días de que el venerado pastor salvadoreño sea canonizado en Roma.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: