Hace unos días, aprovechando la amistad que tiene con él, José Juan Barea le preguntó a su coach, Rick Carlisle, por qué no recibía algunos minutos de acción, y este, sin responderle claramente, raro en su personalidad vertical, le dejó entrever que se debía a órdenes del alto mando gerencial que deseaba desarrollar a los armadores más jóvenes, tales como Jalen Brunson y Delon Wright, además de Seth Curry, que es empleado más como escolta.