Con la extensión de las restricciones a mucha de la actividad social y económica en Puerto Rico para enfrentar la pandemia del COVID-19, el gobierno ha enviado un mensaje claro: la propagación del virus en la isla ocurre a nivel comunitario y está en manos de todos cumplir con el uso de mascarillas y el distanciamiento físico para detenerlo.
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Es deber colectivo frenar el contagio comunitario
Nota de archivo
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