Llegó la temporada navideña y la prioridad de la mayoría tiende a ser –con razón– compartir y celebrar con la familia y con allegados, intercambiar regalos y reflexionar sobre los altibajos que trajo el 2023, haciendo propósitos de mejora para el nuevo año que se avecina. Hagamos como sociedad que esta pausa fraternal y reflexiva perdure.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Hora idónea para el reencuentro humano
Nota de archivo
Esta historia fue publicada hace más de 1 año.