Pamela Rosado, la capitana del Equipo Nacional de baloncesto, figura entre las atletas nominadas para ser abanderada de la delegación boricua en los próximos Juegos Centroamericanos y del Caribe en San Salvador, El Salvador.
El mero hecho de ser nominada llena de mucho orgullo a la quebradillana Rosado, quien de ser la fémina elegida para ese privilegio, se convertiría en la primera mujer baloncelista en ser abanderada de Puerto Rico en unos juegos, indistintamente de que sean regionales, continentales o mundiales.
Uniría su nombre, en la historia del básquet isleño, al de otros baloncelistas abanderados en justas centroamericanas, panamericanas u olímpicas como lo fueron José Juan Barea, Raymond Dalmau, Carlos Arroyo y José ‘Piculín’ Ortiz, entre otros.
Y la nominación y su posible elección tiene a Rosado muy feliz por lo que representa para el baloncesto femenino que se encuentra en el mejor momento de exposición mundial.
“Estoy supercontenta que piensen en mí. Llevo muchos años frente al equipo y para mí sería un honor grandísimo llevar esa bandera que nos representa a todos”, dijo la veterana jugadora. “Pienso en lo que se debe sentir y sería un momento único, especial y que será recordado para siempre”.
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Rosado, de 37 años, ha sido uno de los rostros de la Selección Nacional por los pasados 20 años. Ha representado a Puerto Rico desde las selecciones menores e iría a sus cuartos de Juegos Centroamericanos y del Caribe. Representó a la isla previamente en las ediciones Cartagena 2006, Mayagüez 2010, y Barranquilla 2018.
Rosado ha subido al podio cada vez que ha jugado con Puerto Rico en los Centroamericanos y del Caribe, incluyendo una presea de oro en la edición en Mayagüez y una de plata en Cartagena. También suma un bronce en Barranquilla. El oro de Mayagüez 2010, por su parte, fue el primero para la Selección femenina en justas regionales.
Ahora perfila ir a San Salvador 2023 como parte de la Selección que debe estar entre las favorecidas para subir al podio nuevamente.
“El equipo va bien centrado en lo que quiere. Vamos a tratar de ganar esa medalla. Nos vamos a enfrentar a grandes equipos: a México, Colombia y un sinnúmero de equipos que han ido de menos a más. Hay jugadoras que no van a estar por compromisos previos, pero vamos con un buen núcleo, que es lo importante”, dijo Rosado sin mencionar nombres, pero siendo obvio que una que no podrá ir lo será Arella Guirantes, que está activa en la WNBA.
Colectivamente, Rosado se ha mantenido como la armadora de la Selección que jugó en el 2019 en su primera Copa del Mundo de la FIBA, en el 2021 en sus primeros Juegos Olímpicos y que en el 2022 logró un histórico octavo lugar en su segunda aparición en el certamen mundialista.
Llevar la monoestrellada en San Salvador 2023 sería una gesta muy significativa en la historia del baloncesto femenino boricua.
“Sería grandioso para el baloncesto femenino. Hemos tenido un avance espectacular en estos últimos años. Es el trabajo de muchas jugadoras y de muchas mujeres que han estado ahí por muchos años. Sería la primera vez en la historia y sería un honor para mí y para ese grupo de mujeres que ha dado todo por el baloncesto”, dijo.
“Sería, sin duda, un reconocimiento al avance que hemos dado. Que piensen en el baloncesto femenino para llevar la monoestrellada es grandioso. Estoy supercontenta”, apuntó Rosado.
Otra atleta considerada para encabezar la delegación es la fondista Beverly Ramos.