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José Miranda dijo que los Twins de Minnesota quieren que sea su tercera base en 2023 y que le pidieron trabajar para lograr más agilidad, así como velocidad en las bases.
José Miranda dijo que los Twins de Minnesota quieren que sea su tercera base en 2023 y que le pidieron trabajar para lograr más agilidad, así como velocidad en las bases. (David Villafane/Staff)

A sus 24 años y con el ‘diploma’ en su mano que lo acredita como jugador de Grandes Ligas, el puertorriqueño José Miranda tiene motivaciones de sobra en este periodo muerto para prepararse de cara a lo que será su segunda temporada en las Mayores, y la primera desde el primer día.

Miranda tuvo un excepcional año de novato con los Twins de Minnesota, con quienes terminó jugando 125 partidos y matriculándose como un jugador de impacto, tanto a la ofensiva como defensivamente.

El futuro parece sonreírle al vegalteño de 6′2″ de estatura, que fue seleccionado en el sorteo de novatos de 2016 por los Twins en la segunda ronda, y quien firmó como profesional siendo un campocorto.

Pero con el también boricua Carlos Correa adueñado de la posición en su primer año con los Twins en 2022, Miranda fue subido en mayo pasado y alternó entre la primera y tercera base. No obstante, aunque se desempeñó más como inicialista, jugando en esa posición 77 desafíos frente a solo 34 en la antesala, al novel jugador se le entregó prácticamente la esquina caliente para la campaña 2023.

Esa encomienda, junto a la invitación que recibió para representar a Puerto Rico en el próximo Clásico Mundial de Béisbol previo a la temporada de Grandes Ligas, tienen a Miranda trabajando a gusto, al punto que no quiso descansar mucho tras llegar a la isla.

“Empezamos desde octubre, la temporada muerta, en el gimnasio. Estamos ahora mismo los lunes, miércoles y viernes en el gimnasio, y los martes y jueves en la pista, todo eso para poder mejorar la agilidad y mejorar la fuerza. Son partes importantes en el juego. Eso es lo que estamos trabajando, tratando de mejorar también el físico. Estaba trabajando también en bajar el peso, para poderme sentir más ágil, y hasta el momento estamos bien”, dijo Miranda en una entrevista con El Nuevo Día previo a una sesión de entrenamiento en el gimnasio de su entrenador personal, Emmanuel Batista, quien indicó que el jugador de cuadro ya rebajó desde octubre al presente cerca de unas 20 libras, llegando a su peso ideal de 205 libras.

Miranda dijo que a su arribo a la isla a finales de octubre, solo descansó una semana y de inmediato volvió a la carga.

“Ahora mismo estoy un poco más explosivo, para poder ir para allá un poco más rápido, que fueron cosas que el equipo me recalcó. Me dijeron que querían que mejore la velocidad”.

Miranda bateó en 2022 para promedio de .268 con 15 cuadrangulares y 66 carreras empujadas, números formidables considerando que se trataba de un novato. Con el guante también lució defensivamente, pues cometió solo tres errores en 595.1 entradas en la primera base, y otros tres en 246.2 innings en la tercera.

Ahora que sabe que tendrá asignada la antesala de manera fija, está enfocado en trabajar para conseguir mayor agilidad.

“Esa es la mentalidad. Eso fue lo que me comentaron desde el año pasado cuando se acabó la temporada. Que la meta de ellos conmigo es que yo juegue tercera base este año. Y esa es la mentalidad, llegar allá y ganarme ese puesto de tercera base, y jugar 150 o 160 juegos en esa posición, que es la que yo quiero jugar ahora, y en el futuro en mi carrera”.

Para Miranda, la antesala no será nueva pues recordó que un año después de su firma como profesional, comenzó a lugar en las ligas menores tanto la segunda base como la tercera. Y los Twins están contando con él para asumir esa responsabilidad, luego de que cambiaron en la presente temporada muerta al colombiano Gio Urshela, quien fue su antesalista titular en 2022.

En 2022 jugó más como primera base con los Twins, la misma posición que tendrá con Puerto Rico en el próximo Clásico Mundial de Béisbol.
En 2022 jugó más como primera base con los Twins, la misma posición que tendrá con Puerto Rico en el próximo Clásico Mundial de Béisbol. (David Villafane/Staff)

Con el Clásico Mundial en su lista de deseos

Miranda explicó que con el Clásico Mundial de Béisbol en agenda para representar a Puerto Rico por primera vez en ese certamen, el trabajo también se adelantó un poco en lo que respecta a su acondicionamiento físico. No obstante, sí tuvo otra semana de ocio pues se tomó unas vacaciones en crucero empezando este año.

“Normalmente cogía dos o tres semanas de descanso y de tiempo. Pero este año decidí empezar más temprano. Solamente cogí una semana, y empecé a entrenar para poder sentirme mejor y estar más preparado cuando llegue el Clásico”.

Como todos los años, los jugadores se reportarán a los entrenamientos primaverales de sus respectivas organizaciones a mediados de febrero, y tendrán partidos de exhibición, pero no solo con sus clubes sino que eventualmente se reportarán a sus respectivas selecciones para prepararse de cara al Clásico Mundial. Puerto Rico jugará la ronda preliminar en Miami como parte del Grupo D junto a República Dominicana, Venezuela, Israel y Nicaragua, del 11 al 15 de marzo.

Y Miranda dice que ansía que llegue ya el torneo para poder experimentar en carne propia lo que vio a la distancia en 2017 con apenas 19 años. En se momento ya estaba en liga menor y no formó parte del subcampeonato que logró Puerto Rico en la pasada edición del Clásico, con jugadores que en su mayoría repiten y con los que ahora podrá compartir el mismo uniforme.

“Es un cuadro interior de ensueño. Compartir el terreno con esos tres jugadores del calibre de ellos, representando a Puerto Rico, también es un sueño para mí”, dijo Miranda, refiriéndose a los campocortos Javier Báez, Francisco Lindor y Correa, quienes se repartieron la segunda base, el siore y la tercera en 2017, formando tal vez el mejor cuadro interior de aquel torneo.

Miranda tiene proyectado jugar la primera base, según le dijo el exgerente general de la novena boricua, Eduardo Pérez, quien fue el que lo reclutó antes de su eventual dimisión del cargo en agosto pasado.

“En el 2017 recuerdo que los juegos los estaba viendo en el complejo de ‘spring training’ de nosotros (los Twins) allá en Fort Myers (Florida). Y recuerdo que los veía y me sentía que estaba ahí con ellos (en el torneo). La inspiración y la motivación era mucha. Veía los juegos y decía, ‘contra, me gustaría estar ahí un día, representar a Puerto Rico, poder jugar en el Clásico. Y pues, se me dio”.

“De pensarlo, empieza como una ansiedad por querer estar ahí y jugar ya”.

Carlos Correa (derecha) volverá al campo corto, por lo que Miranda lo tendrá más cerca al jugar la tercera base de manera regular.
Carlos Correa (derecha) volverá al campo corto, por lo que Miranda lo tendrá más cerca al jugar la tercera base de manera regular. (Aaron Gash)

Más cerca de Correa en el cuadro interior

Con la reciente firma de un nuevo contrato como agente libre de Correa con los Twins, por seis campañas y $200 millones, Miranda está celebrando el hecho de que podrá tener al santaisabelino cerca una vez más, y esta vez justo al lado en el cuadro interior, a unos pasos de la tercera base ocupando el campo corto.

“Cuando terminó con nosotros (contratado por los Twins) era algo que no esperábamos por lo que había pasado”, admitió Miranda, refiriéndose a los acuerdos preliminares que logró Correa en el tiempo muerto, primero con los Giants por $350 millones y luego con los Mets por $315 millones, ambos abortados por diferencias de opiniones con personal médico de los equipos, respecto a los exámenes físicos del boricua.

“Es mucha ayuda porque al tener un siore del calibre de él, por el tipo de jugador que es él, te mantiene al tanto de dónde está y dónde tienes que moverte, y qué jugadas tenemos que hacer”, destacó Miranda de Correa. “Es de ayuda. Obviamente él tiene mucho alcance en el terreno y hay que estar pendiente también a eso. Y el liderazgo de él va a ser de mucha ayuda también”.

“Creo que tenemos un buen ‘core’ y también trajimos a Christian Vázquez (firmó con los Twins por tres campañas y $30 millones), que va a ser de mucha ayuda en la receptoría. Es una mente maestra con los lanzadores. Y también tenemos otros boricuas, como Jorge López, Jovani Morán y José de León, que también va a estar compitiendo por una posición. Eso es superbueno, tener más boricuas”.

En efecto, con Miranda son seis los puertorriqueños en las filas de los Twins, sin contar al lanzador derecho De León, quien tiene un contrato de liga menor, pero podría tener la opción de ser ascendido. En el roster oficial, sí están Correa, Miranda y Vázquez, y los lanzadores López, Morán y Emilio Pagán.

“Los ‘bori-Twins’”, dijo riendo Miranda. “De verdad que brutal; se siente bien tener los compañeros del país de uno. Llena de felicidad, que de una isla tan pequeña salga tanto pelotero y que podamos jugar y compartir a ese nivel”.

Su entrenador, Batista, dijo que el enfoque en este periodo muerto previo a la próxima temporada ha sido trabajar con la agilidad y explosividad del jugador, que fueron requerimientos que hizo el equipo, con el que ha estado en comunicación. Batista subrayó que el acondicionamiento de Miranda ha sido una labor grupal que incluyó a dos nutricionistas, quiroprácticos, y hasta un entrenador de pista y campo.

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