La modelo de nacionalidad rusa, Irina Shayk, se situó en el centro de la polémica al posar con un maquillaje que simuló la violencia en su rostro: un ojo morado y unas tiras en la nariz. Al instante, los usuarios de las redes sociales se hicieron eco de la situación y criticaron la iniciativa.

Shayk posó en el desfile de Mowalola SS24 con un vestido largo metálico y unas botas azules de tacos en uno de sus “looks”, para posteriormente presentar una camiseta oversize negra con una imagen del rapero Tupac Shakur, condenado por abuso sexual y fallecido en 1996.

“¿Qué les depara el futuro a las mujeres jóvenes, cuando la violencia masculina se normalice y se embellezca?”, apuntó una activista.

La directora de Right to Equality, Charlotte Proudman, señaló: “El abuso doméstico es la nueva moda y entretenimiento . Después de ver a la gente recrear la evidencia de Amber Heard sobre la violencia sexual, ahora una modelo famosa finge un ojo morado mientras usa una camiseta de un hombre acusado de agresión sexual”, sentenció.

Proudman apuntó contra la normalización de la violencia de género.

Otra usuaria destacó que detrás del “look” que lució la modelo rusa se encontró el rapero Kanye West , quien se situó en el foco de la polémica en numerosas ocasiones por defender a artistas acusados de agresión o abuso sexual.

“Maquillar a las supermodelos con un ojo morado falso es absolutamente reprobable. Qué insulto para las víctimas de violencia doméstica el hecho de ver lesiones como esta embellecidas para el consumo público”, sentenció @aak1880, que destacó a la organización como responsable.

Por su parte, la periodista Jessica Lara descargó: “A la London Fashion Week le parece buena idea que en su pasarela aparezca una mujer con una marca de la violencia que padecen demasiadas mujeres, como un accesorio de glamour”.