Washington - El presidente Donald Trump ha desatado una nueva controversia y una posible batalla legal al intentar destituir a Lisa Cook, la primera mujer negra en la junta de gobernadores de la Reserva Federal (Fed). Esta acción ha generado un intenso debate sobre la independencia de las instituciones y ha sido criticada como un ataque a las políticas de diversidad e inclusión.

La orden de Trump de despedir a Cook se alinea con el esfuerzo de la Casa Blanca por expandir su poder a través de partes ostensiblemente independientes del gobierno federal y de la economía y la sociedad estadounidense en general, lo que, según los críticos, puede dañar a largo plazo la confianza en los datos, las políticas y los procesos que sustentan la fortaleza estadounidense. La medida también eliminaría a una investigadora y defensora de larga data de la formulación de políticas diversas y equitativas del liderazgo.

El lunes, Trump anunció el despido de Cook después de que el director de una agencia reguladora de vivienda, designado por el presidente, alegara que Cook cometió fraude hipotecario. Cook rechaza estas acusaciones como legalmente infundadas.

“El presidente Trump pretendió despedirme ‘por causa justificada’ cuando no existe tal causa bajo la ley, y no tiene autoridad para hacerlo”, declaró Cook a The Associated Press. “No renunciaré. Continuaré cumpliendo con mis deberes para ayudar a la economía estadounidense como lo he estado haciendo desde 2022″.

Kush Desai, portavoz de la Casa Blanca, afirmó que Cook “fue acusada de manera creíble de mentir en documentos financieros desde una posición altamente sensible supervisando instituciones financieras” y que su destitución “mejora la responsabilidad y credibilidad de la Junta de la Reserva Federal tanto para los mercados como para el pueblo estadounidense”.

La decisión de Trump provocó una reacción inmediata de los legisladores negros. “La Dra. Lisa Cook es la primera mujer negra en servir en la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal. Trump está tratando de removerla sin una pizca de evidencia creíble de que haya hecho algo malo”, declaró Hakeem Jeffries, líder de la minoría en la Cámara de Representantes.

La Liga Urbana Nacional, un grupo de derechos civiles, calificó la acción de Trump como una “caza de brujas” y condenó los comentarios del presidente sobre ella como “asesinato de carácter”. El Caucus Negro del Congreso defendió a Cook como “una economista muy respetada que ha dedicado su carrera a desmantelar las barreras a la innovación y la participación económica”.

El caucus denunció la retórica de Trump y su esfuerzo por despedir a Cook como “un ataque racista, misógino e ilegal contra la integridad e independencia de la Reserva Federal. Es un intento peligroso de politizar y ejercer control sobre el banco central, uno que solo continuará dañando la economía, perjudicando a los estadounidenses trabajadores y socavando nuestra credibilidad en el escenario mundial”.

Cook ha enseñado economía y relaciones internacionales en la Universidad Estatal de Michigan, y anteriormente también formó parte del profesorado de la Escuela de Gobierno Kennedy de la Universidad de Harvard. Fue becaria Marshall y recibió títulos de la Universidad de Oxford y del Spelman College, una universidad históricamente para mujeres negras en Atlanta.

Cook ha dedicado gran parte de su investigación a examinar cómo la discriminación racial y la violencia selectiva crearon barreras para el avance económico de los afroamericanos. Cook también ha asesorado a los gobiernos de Nigeria y Ruanda en reformas bancarias y desarrollo económico, respectivamente. Tiene una reputación en el campo por asesorar a economistas más jóvenes a través del programa de verano de la Asociación Económica Americana.

En 2022, fue confirmada para su puesto en la junta por el Senado en una votación partidista. Los republicanos la criticaron por no estar calificada y encontraron que su investigación estaba demasiado centrada en la raza, mientras que los activistas conservadores pusieron en duda la calidad de su investigación. Los demócratas descartaron tales críticas como infundadas.

El expresidente Joe Biden nominó a Cook para un mandato completo de 14 años en mayo de 2023. Los republicanos volvieron a plantear preocupaciones sobre su investigación académica en la intersección de la economía y la raza. Durante su audiencia de confirmación de 2023 ante el Comité Bancario del Senado, el entonces senador JD Vance, republicano por Ohio, interrogó a Cook sobre sus comentarios pasados relacionados con la diversidad.

“Mi preocupación es que, especialmente en la Reserva Federal, que está haciendo un importante trabajo de supervisión”, dijo Vance, “en la medida en que nos centramos en la diversidad, eso puede distraernos de nuestra capacidad para centrarnos en cosas mucho, mucho más importantes... Espero que ninguno de nosotros se distraiga con algunas de estas otras preocupaciones”.

Cook respondió que “como gobernadora de la Reserva Federal, pienso primero en el doble mandato y pienso en las dos vertientes de ese mandato”. Y “como gobernadora, me he comprometido con mis colegas en el FOMC y he luchado contra la inflación de manera agresiva”.

Desde que se unió a la junta, Cook ha abogado por que la adopción de la inteligencia artificial en toda la economía se haga de manera inclusiva que garantice que todas las comunidades cosechen todo el potencial de la tecnología. También ha sido una defensora de la independencia de la Reserva Federal y del cumplimiento de estrictos estándares de recopilación de datos y formulación de políticas.

“Una cosa que siempre he dicho desde que me convertí en gobernadora es que nosotros, como formuladores de políticas, tenemos que ser humildes, ágiles y dependientes de los datos”, dijo Cook durante una charla en diciembre en la Universidad de Virginia. “Tenemos que mirar los datos e interpretarlos lo mejor que podamos”.

No está claro si el intento de destitución de Cook por parte de Trump sacude la confianza más amplia en la capacidad independiente de la Reserva Federal para llevar a cabo la política monetaria. Trump ha declarado sin rodeos que quiere que la Reserva Federal siga sus políticas preferidas sobre las tasas de interés. El presidente ha reprendido repetidamente en público al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, por mantener la independencia de la junta.

Los ataques se intensificaron hasta convertirse en amenazas de acciones legales cuando Trump escribió en las redes sociales que estaba considerando si permitir que procediera una “demanda importante contra Powell” por el costo de una renovación en el edificio de la Reserva Federal.

Trump ha dicho desde entonces que tiene la intención de nombrar a más aliados para la junta de la Reserva Federal, a la que el país confía el mantenimiento de la estabilidad económica.

“Tendremos una mayoría muy pronto, así que será genial”, dijo Trump a los periodistas el martes.

Algunos economistas conservadores habían alegado durante mucho tiempo que los antecedentes de Cook y otros miembros de la junta significaban que utilizarían los amplios poderes del banco central para promulgar políticas más allá de su doble mandato.

Tales afirmaciones contra Cook encontraron poca aceptación en sus primeros años en la junta, aunque las investigaciones de la administración Trump plantearon otras críticas.

Bill Pulte, director de la Agencia Federal de Financiamiento de la Vivienda, pidió la semana pasada la renuncia de Cook después de alegar que Cook había “falsificado documentos bancarios y registros de propiedad para adquirir términos de préstamo más favorables, potencialmente cometiendo fraude hipotecario” en una carta a la fiscal general Pam Bondi.

Cook dijo en respuesta a las acusaciones de Pulte que “tomaré en serio cualquier pregunta sobre mi historial financiero como miembro de la Reserva Federal, por lo que estoy reuniendo la información precisa para responder cualquier pregunta legítima y proporcionar los hechos”.

“No tengo intención de ser intimidada para renunciar a mi puesto debido a algunas preguntas planteadas en un tuit”, dijo Cook, en un comunicado.

El Departamento de Justicia ha lanzado desde entonces su propia investigación sobre las presentaciones de Cook. Cook no ha sido acusada de ningún delito.

Trump y sus aliados pidieron de inmediato la destitución de Cook, argumentando que las acusaciones por sí solas eran suficientes para justificar su destitución. Pulte ha presentado cargos similares contra otros adversarios de Trump, como la fiscal general de Nueva York, Leticia James, y el senador Adam Schiff de California.

Como exestrella de “reality shows” que se hizo conocido por la frase “¡Estás despedido!" en “The Apprentice” de la NBC, Trump no es ajeno a despedir a personas de muchos orígenes. Pero la campaña del presidente contra las políticas de diversidad, equidad e inclusión a menudo ha puesto a los defensores de la diversidad, muchos de los cuales son destacados líderes negros que rompen barreras, en su punto de mira.

En marzo, Trump despidió al general Charles Q. Brown Jr., presidente del Estado Mayor Conjunto, el puesto uniformado de más alto rango en las fuerzas armadas. Brown fue el segundo hombre negro en ocupar el cargo. Había pronunciado discursos sobre la discriminación racial y emitido políticas que promovían programas diversos, equitativos e inclusivos en el ejército, medidas que le valieron la ira de muchos en la órbita de Trump, incluido el secretario de Defensa Pete Hegseth.

En mayo, Trump despidió a la bibliotecaria del Congreso, Carla Hayden, después de que una organización conservadora de defensa la acusara de ser una “radical”. La medida del presidente planteó preguntas sobre la separación de poderes, el futuro de los vastos archivos de la biblioteca y la preservación de libros e investigaciones que no se ajustan a la interpretación de la historia de la administración republicana.

Trump ha despedido a docenas de otros designados políticos y no partidistas en todo el gobierno federal, incluso en todos los departamentos principales y en juntas reguladoras como la Oficina de Estadísticas Laborales, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor, la Corporación para la Radiodifusión Pública, la Comisión Federal de Comercio, la Comisión Federal de Elecciones, la Autoridad del Valle de Tennessee y más.

Dedrick Asante-Muhammad, presidente del Centro Conjunto de Estudios Políticos y Económicos, advirtió que la posible destitución de Cook amenazaba la independencia de la Reserva Federal, “y socava la confianza en la institución en un momento en que la estabilidad es críticamente necesaria”, y representaba un ataque general contra la experiencia negra en sí misma.

“Este ataque a la Dra. Cook no se trata solo de un individuo. Plantea una pregunta más amplia y urgente: ¿se respetará y protegerá el liderazgo negro en las instituciones más vitales de Estados Unidos, o se socavará y deslegitimará?“, indicó.