Corea del Sur y Estados Unidos lanzarán su ejercicio militar anual a gran escala este mes para reforzar la preparación contra las amenazas de Corea del Norte, dijeron el jueves los aliados, en una medida que probablemente irrite a Pyongyang en medio de un prolongado estancamiento en la diplomacia.

El ejercicio también se produce en un contexto de preocupación en Seúl de que la administración de Donald Trump pueda sacudir la alianza de décadas al exigir mayores pagos por la presencia de tropas estadounidenses en Corea del Sur y posiblemente moverse para reducirla a medida que Washington pone más atención en China.

Ulchi Freedom Shield, el segundo de los dos ejercicios a gran escala que se realizan anualmente en Corea del Sur, después de otra serie de ejercicios en marzo, generalmente involucra a miles de tropas en entrenamiento de puesto de mando simulado por computadora y ejercicios de campo combinados.

El ejercicio del 18 al 28 de agosto puede desencadenar una reacción airada de Corea del Norte, que califica los simulacros conjuntos como ensayos de invasión y, a menudo, los utiliza como pretexto para intensificar las demostraciones militares y las pruebas de armas destinadas a avanzar en su programa nuclear.

Redoblando sus ambiciones nucleares, Corea del Norte ha rechazado repetidamente los llamamientos de Washington y Seúl para reanudar la diplomacia destinada a liquidar su programa de armas, que descarriló en 2019. Ahora, el Norte ha convertido a Rusia en la prioridad de su política exterior, enviando miles de tropas y grandes cantidades de equipo militar para apoyar la guerra de Moscú en Ucrania.

Alrededor de 18,000 soldados surcoreanos participarán en el ejercicio Ulchi Freedom Shield de este año, dijo el portavoz del jefe del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, coronel Lee Sung Joon, durante una sesión informativa conjunta con las fuerzas estadounidenses en Corea, que no reveló el número de tropas estadounidenses participantes.

Tanto Lee como el director de Asuntos Públicos de las fuerzas estadounidenses en Corea, coronel Ryan Donald, restaron importancia a la especulación de que el nuevo gobierno liberal de Corea del Sur, liderado por el presidente Lee Jae Myung, buscaba reducir el ejercicio para crear un impulso para el diálogo con Pyongyang, diciendo que su escala es similar a la de años anteriores. Sin embargo, el coronel Lee dijo que aproximadamente la mitad de los 40 programas de entrenamiento de campo originalmente planeados para el ejercicio se pospusieron hasta septiembre debido a preocupaciones por el calor.

La amenaza de los programas nucleares y de misiles en avance de Corea del Norte será un enfoque clave del ejercicio, que incluirá entrenamiento para disuadir el uso nuclear de Corea del Norte y responder a sus ataques con misiles, dijo Lee.

El ejercicio también incorporará lecciones de conflictos recientes, incluida la guerra de Rusia en Ucrania y el enfrentamiento entre Israel e Irán, y abordará las amenazas de drones, el bloqueo de GPS y los ataques cibernéticos, dijeron Lee y Donald.

“Miramos en todo el mundo los desafíos que podemos enfrentar en el campo de batalla e incorporamos eso para que podamos desafiar a los participantes en el ejercicio”, dijo Donald. “Estamos enfocados en asegurar que la alianza sea sostenible y disuada de manera creíble la agresión de la RPDC y aborde los desafíos de seguridad regional más amplios”, dijo, usando las iniciales del nombre formal de Corea del Norte, la República Democrática Popular de Corea.

El anuncio del ejercicio se produjo una semana después de que la poderosa hermana del líder norcoreano Kim Jong Un rechazara las propuestas del gobierno de Lee Jae Myung, diciendo que la “confianza ciega” de Seúl en su alianza con Washington y la hostilidad hacia Pyongyang no la hacen diferente de su predecesor conservador de línea dura.

Kim Yo Jong luego emitió una declaración separada desestimando la intención de la administración de Trump de reanudar la diplomacia sobre la desnuclearización de Corea del Norte, lo que sugiere que Pyongyang, ahora enfocado en expandir los lazos con Rusia, ve poca urgencia en reanudar las conversaciones con Seúl o Washington.

En el otro lado de las preocupaciones de seguridad de Seúl está si su alianza con Washington verá cambios dramáticos durante el segundo mandato del presidente Trump, quien ha sacudido a aliados y socios con aumentos de aranceles y exigencias de que reduzcan su dependencia de Estados Unidos y gasten más en su propia defensa.

Remontándose a su primer mandato, Trump ha pedido regularmente a Corea del Sur que pague más por los 28,500 soldados estadounidenses estacionados en su territorio. Comentarios recientes de funcionarios clave de la administración de Trump, incluido el subsecretario de Defensa Elbridge Colby, también han sugerido un deseo de reestructurar la alianza, lo que, según algunos expertos, podría afectar el tamaño y las funciones de las fuerzas estadounidenses en Corea del Sur.

Bajo este enfoque, Corea del Sur asumiría un papel más importante en la lucha contra las amenazas de Corea del Norte, mientras que las fuerzas estadounidenses se centrarían más en China, posiblemente dejando a Seúl para enfrentar beneficios reducidos pero mayores costos y riesgos, dicen los expertos. Durante la conferencia de prensa del jueves, Donald no proporcionó una respuesta específica cuando se le preguntó si las tropas estadounidenses y surcoreanas durante su ejercicio combinado se entrenarán para una posible realineación de las tropas estadounidenses para enfrentar amenazas regionales más amplias.

El futuro de la alianza posiblemente sea un tema en una cumbre entre Donald Trump y el presidente surcoreano Lee, que se espera para este mes. En una entrevista reciente con The Washington Post, el ministro de Relaciones Exteriores de Lee, Cho Hyun, restó importancia a la posibilidad de cambios significativos en la presencia militar estadounidense en Corea del Sur.

“Estamos hablando con Estados Unidos, pero no hay preocupación por las fuerzas estadounidenses en Corea. Creemos que permanecerán como tales y su papel seguirá siendo el de hoy”, dijo.