Londres— El Reino Unido invertirá unos $1,760 millones de euros en la construcción de, al menos, seis fábricas de municiones y componentes explosivos, como parte de un plan para reforzar su capacidad militar, informó este sábado el Ministerio de Defensa de ese país.

La iniciativa incluye además el compromiso de adquisición de hasta 7,000 armas de largo alcance de fabricación británica, lo que permitirá crear más de 1,000 empleos cualificados y otros 800 adicionales en todo el país, indicó en un comunicado.

Estas medidas forman parte de la llamada Revisión Estratégica de la Defensa (SDR, en inglés), que encargó a expertos el actual Gobierno laborista y que se presentará la semana próxima.

Entre sus recomendaciones, el informe insta a garantizar una capacidad de producción armamentística continua y aumentar las reservas de municiones para hacer frente a conflictos de alta intensidad, necesidades que ha puesto de manifiesto el conflicto en Ucrania.

Con esta inversión, el gasto en municiones del Reino Unido alcanzará los $7,100 millones de euros durante esta legislatura, según el ministerio.

El anuncio se enmarca en el objetivo del Gobierno del primer ministro, Keir Starmer, de elevar el gasto en defensa al 2.5 % del Producto Interno Bruto (PIB) para 2027, y al 3 % antes del fin de la próxima legislatura en 2034, en un contexto de creciente incertidumbre internacional.

“El Ejército solo tiene la fortaleza de la industria que lo respalda”, afirmó en el comunicado el ministro de Defensa, John Healey, quien destacó que el plan impulsa asimismo el crecimiento económico y el empleo.

La titular de Economía, Rachel Reeves, subrayó que “una economía fuerte necesita una defensa nacional sólida, y la inversión en armamento y municiones, así como el apoyo a casi 2,000 empleos adicionales en todo el Reino Unido, demuestran que ambas van de la mano”.