El exdirector de Obras Públicas del Municipio de Cataño, Pedro Marrero Miranda, fue sentenciado hoy, jueves, a 30 meses de prisión federal.
No tendrá que restituir dinero ni recibió multas, pero tendrá que cumplir tres años de libertad condicionada al salir de la cárcel, según la condena fue impuesta por el juez federal Raúl Arias Marxuach en el tribunal federal de Hato Rey, después de que Marrero Miranda se declarara culpable en junio pasado.
Marrero Miranda, de 54 años, laboró bajo la administración del exalcalde de Cataño Félix “el Cano” Delgado, quien se declaró culpable por corrupción en noviembre del año pasado.
Según el Ministerio Público, el exfuncionario recibió al menos $40,000 durante el periodo de la “conspiración” mientras dirigía la oficina de Obras Públicas del Municipio de Cataño.
La fiscalía federal había solicitado que Marrero Miranda fuera encarcelado por 30 meses por entender que no era excesivo ni muy poco.
Aunque las guías de sentencia apuntarían a una sentencia de 46 a 57 meses de cárcel, la fiscalía planteó en una moción pasada que podía bajarse hasta 30 meses porque, pese a su participación, Marrero Miranda “no fue el responsable de originar el acuerdo que concedió los contratos a la Compañía A y fue instruido por un oficial electo a conceder el contrato a la Compañía A”.
Mientras, la defensa de Marrero Miranda pidió al juez que le permitiera permanecer en libertad condicionada.
Durante su alocución en la sala judicial, Marrero Miranda expresó que había hecho cambios en su vida “en meses recientes, con la ayuda de pastores y hermanos de mi iglesia”, así como con el apoyo de su familia.
“No puedo cambiar el pasado, pero puedo cambiar lo que ha dejado el pasado y transformar el futuro en un momento más positivo”, manifestó Marrero Miranda. “Así que le pido la oportunidad de seguir adelante y dar testimonio del pasado y un mejor futuro”.
En el expediente público del caso figuran cartas de apoyo para Marrero Miranda de parte de un pastor y del exalcalde de Toa Alta, Luis Raúl Collazo Rivera, para quien trabajó en el mismo puesto de director de Obras Públicas.
“Siempre vi en Pedro un comportamiento ético, honrado y lleno de integridad”, manifestó Collazo Rivera en la misiva.
Por su parte, el juez Arias Marxuach planteó que le aplicó la parte baja de las guías de sentencia para que fuera a la cárcel debido a que el delito que cometió sí tiene víctimas.
Manifestó que con sus actuaciones violó la “confianza pública” que se le confirió como funcionario de Cataño, puesto que no podía usar para velar “por su interés propio”.
Según la denuncia, en los años 2019, 2020 y 2021 Marrero Miranda conspiró para recibir dinero a cambio de proyectos de asfalto en el municipio de Cataño.
El cargo alega que recibió al menos $1 por cada metro cuadrado de asfalto removido por la “Compañía A”, que no fue identificada, pero se sabe que se trata de la empresa JR Asphalt, involucrada en el caso de Delgado Montalvo y con otros funcionarios acusados otros municipios.
Solo en Cataño, J.R. Asphalt obtuvo contratos por $10 millones desde finales de 2017 hasta julio de 2021.
De acuerdo con la denuncia leída por el juez, Marrero Miranda “conspiró a sabiendas con el ‘Individuo A’ y el ‘Individuo B’”, para “corruptamente solicitar, exigir y aceptar para su propio beneficio cosas de valor del ‘Individuo A’ y el ‘Individuo B’, con la intención de ser influenciado y recompensado en conexión con cualquier transacción de negocios y serie de transacciones de la municipalidad de Cataño”.