George Floyd ya no podrá ser olvidado nunca. Su muerte es parteaguas en la lucha por la justicia racial en Estados Unidos, escribe Carlos Dalmau
George Floyd ya no podrá ser olvidado nunca. Su muerte es parteaguas en la lucha por la justicia racial en Estados Unidos, escribe Carlos Dalmau
Una tarde de primavera, un ciudadano afroamericano de nombre George Floyd entró al colmadito que solía frecuentar, en la tranquila ciudad de Minneapolis. Puede que ese día anduviera algo distraído, puesto que, igual que millones de norteamericanos, había perdido su trabajo por la pandemia del COVID-19. Veinte minutos más tarde, Floyd moría asfixiado bajo la rodilla de un policía blanco. Lo que pasó lo conoce el mundo entero. ¿Qué representa la muerte de George Floyd para nosotros?
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