Nadie duda que el Partido Popular Democrático (PPD) sufra la misma crisis que el régimen político que éste creó, el Estado Libre Asociado. Aunque ha electo a dos de los últimos tres gobernadores, ha perdido el voto íntegro en estas tres elecciones. Presidir el punto más bajo de la crisis causada por la partidocracia, no ayuda a sus posibilidades de reelección este año. Ante ello, el PPD ha optado “reinventarse”. Esta es la estrategia del momento. Se trata de reconfigurar los acervos, destrezas y recursos para restaurar glorias pasadas o acometer nuevas conquistas.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Jalda arriba, cuesta abajo: El nuevo logo del PPD
The opinions expressed in this article are solely those of the author and do not reflect the views or beliefs of El Nuevo Día or its affiliates.





