Tres tiros para un perro que agarra una pelota del golf con el fin de jugar con ella… Este acto cometido por Salil Zaveri denota crueldad y desprecio por la vida animal y es una de las tantas violencias que experimentan los animales en el país. La existencia diaria del perrito del campo de golf dependía de la generosidad y la sensibilidad de algunas personas y esa dependencia la tienen también miles de animales que han sido abandonados. El abandono los expone al deterioro físico y al daño psíquico, al abuso, al rechazo, a la sobrevivencia alimentaria, a los efectos de variabilidad climática y a la búsqueda de un refugio que normalmente es inseguro. Esta situación aumenta de manera exponencial, ameritando una acción urgente por parte del Estado y la ciudadanía como asunto prioritario de la justicia social.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: