Las disputas por esas túnicas negras
La muerte ha vuelto a rondar la Corte Suprema de Estados Unidos, esta vez para reclamar a Ruth Bader Ginsburg, una erudita y liberal que desde antes de llegar al estrado venía luchando decididamente a favor de los derechos de la mujer en una sociedad inherentemente desigual y muchas veces machista. Su muerte ha desatado el debate político de siempre porque, al fin y al cabo, los nombramientos de los jueces del Tribunal Supremo son nombramientos basados en fundamentos ideológicos y políticos de quienes los hacen. Y que no se asombre nadie con esta afirmación porque así ha sido toda la vida y así continuará siendo. Mientras la Constitución diga lo que dice y los políticos no varíen su entendimiento sobre la función judicial del más alto tribunal, se seguirán haciendo las cosas del mismo modo.
Otras columnas de Hiram Sánchez Martínez
miércoles, 14 de abril de 2021
El Taser que mató a Daunte Wright “sin querer queriendo”
Hiram Sánchez Martínez declara que en los cuerpos policíacos, de Puerto Rico incluso, se adiestra para el uso correcto de estas pistolas eléctricas paralizantes y se tienen normas claras al respecto
lunes, 22 de marzo de 2021
La polémica sobre el turismo: lo que aprendimos de Bobby Knight
Es entendible la frustración que siente la gente con la indiferencia de los componentes de nuestro sistema de administración de la justicia ante las reyertas y el desorden en nuestras calles por parte de ciertos turistas, escribe Hiram Sánchez
viernes, 12 de marzo de 2021
Cuando una mujer dice NO
Los varones debemos ser instruidos desde pequeños que no significa no. Que el no de una mujer tiene sentido literal, no metafórico; que el derecho natural a la dignidad de la persona humana es para todos los seres humanos por igual, escribe Hiram Sánchez Martínez
jueves, 4 de marzo de 2021
Contra la impunidad del asesinato de Antonia Martínez Lagares
El asesinato de Antonia Martínez Lagares no debería quedar impune, porque su muerte fue producto de la intolerancia de las ideas que en aquel momento resultaban inaceptables para el gobierno, escribe Hiram Sánchez Martínez