A pesar de que no disponemos de nuestro propio libreto para elaborar un Proyecto Nacional que responda a lo que somos, todavía aguardamos la esperanza de ser adultos y sentarnos a la mesa de las naciones, escribe Juan Luis Negrón Delgado
A pesar de que no disponemos de nuestro propio libreto para elaborar un Proyecto Nacional que responda a lo que somos, todavía aguardamos la esperanza de ser adultos y sentarnos a la mesa de las naciones, escribe Juan Luis Negrón Delgado
La madurez sociológica como nación, la consciencia de sí misma como pueblo y la responsabilidad de construir y determinar metas comunes no surgen como combustión espontánea. Es una forma de estar en el mundo, de entenderlo, comprenderlo y vivirlo. Y es una forma de ser en el mundo. Se plasma en su forma de expresión, su lenguaje y sus gestos propios. En el arte, en la música y en la literatura, proyecta sus alegrías, dolores, esperanzas y desgracias.
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