Mire, como anda la cosa, hay que exigirle al gobierno que, antes de que termine el año, instale “rush” hidrantes de arrasa con tó para meternos debajo del chorro a ver si nos sacudimos esta racha. Oka. ¡A lo nuestro! Moliner nos dice que sahumar, (de la latina suffumare) es “echar sobre alguna cosa humo aromático ” con el fin de purificarlo. Entonces, sahumerio es la acción de sahumar(se). El cura usa mirra y olíbano pero usted puede preparar el suyo como mejor le huela. En fin, de acuerdo con DIRAE (diccionario inverso de Rodríguez Alberich), sahumerio se recoge por primera vez en 1495 en el Vocabulario español-latino de Nebrija; al de Autoridades entra en 1739, ambos con definiciones similares (limpieza o purificación). Alvarez Nazario añade que sahumerio es “una limpieza espiritual de una casa”, ya sea con aguas o humos aromáticos. ¿Despojar? ¡Ahhh! Esa la encontramos en nuestro Tesoro lexicográfico como “quitar con pases las malas influencias que los espíritus ponen en una persona”, donde pase se refiere, según Del Rosario, a sobo (movimiento de manos […] con carácter tranquilizador que le hace el espiritista a una persona). Pingarrón, por su parte, explica que sobar, allá por la edad Media, se empleaba inicialmente con el sentido de golpear o azotar (¿se imagina el sobito?). ¿El baño? Ese consúltelo con Walter en sus rituales de fin de año. Mi querido lector, sahumerio, bañito o despojo, lo más importante es mantener una actitud positiva ante todo. Si este año tocó fondo, usted y yo sabemos muy bien que la única manera de impulsarse con fuerza hacia arriba es … ¡desde abajo! Serenidad. Esto también pasará.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project