

Teselta es una empresa familiar puertorriqueña que brinda un espacio donde su recurso humano puede crecer y desarrollarse profesionalmente, a juzgar por las experiencias compartidas por varios empleados.
Tal es el caso de Ana M. “Annie” Rivera, gerente de Recursos Humanos, quien lleva 29 años en la compañía. “En mis inicios comencé como recepcionista cuando aún cursaba estudios universitarios”, recordó. “De recepcionista pasé a asistente ejecutiva del presidente y luego a asistente ejecutiva del principal oficial ejecutivo. Hoy en día, con una maestría en Administración de Empresas con concentración en Recursos Humanos, soy gerente de Recursos Humanos y secretaria de la Junta de Directores”.
“Durante toda mi carrera he contado con el respaldo y apoyo de la empresa para poder desarrollarme personal y profesionalmente”, acotó Rivera. “La brigada Teselta es mi familia y he crecido durante todos estos años con ella”.
Christian Fernández, gerente de Servicio Interno, tuvo una experiencia similar, tras comenzar su carrera en Teselta hace 14 años en el mostrador del Departamento de Piezas. Luego, ascendió a supervisor de taller y desde hace un año se desempeña en su puesto actual.
Como gerente de Servicio Interno, su labor consiste en trabajar con el servicio a todos los equipos de la flota de renta, así como los equipos para el Departamento de Ventas. “Confirmo que en Teselta hay grandes oportunidades para el desarrollo profesional”, expresó. “Me llena de orgullo poder ser parte de una empresa sólida y con un crecimiento continuo”.
Aunque lleva menos tiempo en la empresa, Danna Rivera, vendedora de equipo pesado, también ha podido desarrollarse profesionalmente desde que comenzó a trabajar como recepcionista y cajera hace dos años y medio. “Lo cual agradezco porque, sin esa experiencia, no estaría donde estoy ahora”, dijo.
Después de adquirir experiencia colaborando con los departamentos de Piezas y de Servicio, se integró al Departamento de Ventas en 2022, en lo que se conoce como “Inside Sales”. Ahora es representante de ventas, cubriendo 25 pueblos del noreste, sureste y centro sur de la isla, incluyendo Vieques y Culebra.
“En Teselta me han ofrecido la oportunidad de aumentar mi experiencia. Con sus adiestramientos continuos, programas de incentivos y la apertura a escuchar nuevas ideas, ofrecen un espacio en donde puedo continuar mi desarrollo profesional”, aseguró la vendedora.
La empresa, que cuenta con 600 empleados, de los cuales 200 trabajan en Puerto Rico, también apoya el desarrollo de la mujer en la industria que, tradicionalmente, es liderada por hombres. La gerente de Recursos Humanos informó que, en la actualidad, el 24 % del personal está compuesto por mujeres —la mayoría ocupa puestos de supervisión y liderazgo.
Así también lo reconoce la vendedora de equipo pesado, quien expresó que “la importancia de la presencia femenina en esta industria es vital. Entiendo que tenemos mucha tela que cortar y por falta de recursos no hemos podido abarcar más terreno. Me siento más que bendecida y valiosa de ser parte de una familia que lleva más de 60 años ofreciendo un servicio de calidad”, manifestó la vendedora de Teselta.
De acuerdo con Jahaira Adames, Chief of Staff, el organigrama de la compañía “es fundamental para la planificación de carrera de nuestros talentos, pues les muestra las posibles rutas de crecimiento y desarrollo dentro de la empresa”.
“Esta claridad les ayuda a visualizar y trabajar hacia su crecimiento profesional, dentro de un marco que reconoce y premia el talento y el esfuerzo”, agregó la ejecutiva.
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