22 de diciembre de 2025 - 11:10 PM
La tos nocturna figura entre los síntomas más incómodos de los virus respiratorios. Suele intensificarse durante la noche e nterrumpe el sueño, por lo que muchas personas buscan alternativas simples para dormir mejor.
Uno de los recursos más comunes en los hogares es la miel. A este alimento se le atribuye desde hace años un efecto calmante sobre la garganta. Su uso no responde solo a la tradición. Diversos estudios médicos analizaron su impacto en la tos nocturna. Los resultados señalan beneficios en situaciones específicas.
La miel puede resultar útil cuando la tos se asocia a infecciones virales leves de las vías respiratorias altas. Entre ellas figuran el resfriado común y la gripe. Esto aplica cuando no existen síntomas de alarma.
Su textura viscosa recubre la garganta. Reduce la irritación. Atenúa el reflejo de la tos, sobre todo antes de dormir. Investigaciones médicas indicaron que una pequeña cantidad antes de acostarse disminuye la frecuencia e intensidad de la tos nocturna. También favorece una mejor calidad del sueño en niños mayores y adultos.
El efecto suele ser moderado. No actúa como un medicamento. En algunos casos permite pasar una noche más tranquila sin recurrir a jarabes u otros productos innecesarios.

La miel no funciona como tratamiento general para la tos. No se recomienda cuando el síntoma persiste o se acompaña de fiebre alta, dificultad para respirar o dolor en el pecho. En estas situaciones resulta necesario consultar a un profesional de salud.
Este alimento no debe administrarse a bebés menores de 12 meses debido al riesgo de botulismo infantil. También requiere precaución en personas con diabetes u otros trastornos metabólicos, ya que contiene azúcares. Incluso cantidades pequeñas deben valorarse con cuidado en estos casos.
Las noticias explicadas de forma sencilla y directa para entender lo más importante del día.

Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: