

3 de septiembre de 2025 - 6:58 AM
Los Ángeles - Un jurado le dio a Cardi B una victoria rápida y absoluta el martes en un juicio por la demanda de una guardia de seguridad que alegaba que la estrella de rap la agredió en el consultorio de un médico durante su entonces secreto primer embarazo.
El jurado de seis hombres y seis mujeres en un pequeño juzgado en Alhambra, California, deliberó durante solo una hora antes de encontrar a Cardi B no responsable en la demanda presentada por Emani Ellis, quien alegó que Cardi le cortó la cara con una uña y le escupió en el pasillo de un obstetra de Beverly Hills en febrero de 2018.
Solo se requerían nueve de los 12 miembros del jurado para un veredicto en el caso civil, pero su decisión a favor de Cardi B fue unánime.
“La próxima persona que intente presentar una demanda frívola contra mí, la contrademandaré y haré que pague, porque esto no está bien”, dijo fuera del juzgado, donde posó para fotos con fans. “No soy esa celebridad a la que demandas y crees que va a llegar a un acuerdo. No voy a llegar a un acuerdo. Especialmente cuando soy súper completamente inocente”.
Dijo que tuvo que perderse el primer día de clases de sus hijos debido al juicio, y dijo que su frente estaba “cruda, cruda, cruda” después de todos los elaborados cambios de peluca durante el juicio que en un momento incluso dejaron a su abogado confundido sobre cuál era su cabello real. (Ninguno de ellos lo era, dijo con una sonrisa).
Durante un receso para el almuerzo antes del veredicto del martes en un momento capturado por cámaras de varios medios de comunicación, lanzó un marcador que estaba usando para autógrafos a un hombre que le gritó preguntas sobre si estaba embarazada actualmente y quién es el padre. Ella calificó las preguntas de irrespetuosas.
En dos días de testimonio la semana pasada que fueron transmitidos en vivo, ampliamente vistos y llenos de momentos virales, la estrella del hip-hop testificó que temía que Ellis hiciera público su embarazo. Reconoció que las dos discutieron, pero dijo que nunca se puso físico.
“Lo diré en mi lecho de muerte. No toqué a esa mujer”, dijo después de su victoria. “No toqué a esa chica. No puse mis manos sobre esa chica”.
Ron Rosen Janfaza, el abogado de la demandante Ellis, no respondió de inmediato a un correo electrónico en busca de comentarios. Dijo fuera de la corte que planean apelar la decisión.
Después de varios días libres, el juicio se reanudó con los argumentos finales el martes.
Janfaza les dijo a los miembros del jurado que Ellis, quien esperaba trabajar en la aplicación de la ley o algo similar, “perdió su futuro” junto con su trabajo por el incidente.
“Ya sea el FBI, la policía, el abogado, lo que sea que quisiera hacer, este incidente lo cortó”, dijo en su argumento final. “No más, debido al trauma que sufrió”.
También criticó la blasfemia que Cardi usó libremente durante su testimonio, sugiriendo que despreciaba los procedimientos.
“La acusada vino aquí, usó todo este lenguaje soez”, les dijo a los miembros del jurado. “Este es un tribunal de justicia, no se puede hablar de esta manera en la corte. Nunca había visto esto antes”.
Cardi testificó que había estado visitando Los Ángeles haciendo trabajo promocional en febrero de 2018 en torno al Juego de Estrellas de la NBA de ese año. Tenía cuatro meses de embarazo con el primero de sus tres hijos con el rapero Offset. Le había dicho a su círculo íntimo que estaba teniendo un bebé, pero no al público ni a sus padres.
El consultorio del obstetra había estado cerrado a otros pacientes un sábado para su privacidad.
Dijo que Ellis, una guardia de seguridad del edificio, la siguió a su cita en el quinto piso. Cardi les dijo a los miembros del jurado la semana pasada que escuchó a Ellis decir su nombre en un teléfono y parecía estar filmándola.
“Le dije, ‘¿Por qué estás grabando?’”, testificó Cardi, “y ella dijo, ‘Oh, lo siento’. Prácticamente se disculpó”.
Pero la discusión se volvió cada vez más acalorada, dijo.
“Mientras discutíamos, ella me está respaldando, está caminando hacia mí”, dijo Cardi.
Ellis testificó que el incidente la dejó humillada y traumatizada, y que la cicatriz en su rostro requirió cirugía estética. Ellis, quien perdió su trabajo por el incidente, buscó daños que incluyen gastos médicos, compensación por sufrimiento emocional y físico, y salarios perdidos, junto con daños punitivos. Ella no especifica una cantidad total en la demanda, pero Cardi dijo desde el estrado que la está “demandando por $24 millones”.
Una recepcionista que interrumpió la discusión entre Cardi y Ellis respaldó en gran medida el relato de la rapera en su testimonio.
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