Un día tranquilo en Jensen Beach, en el estado de Florida, se convirtió en un espectáculo digno de película cuando un caimán de siete pies decidió refrescarse en la piscina de una casa en Pinecrest Lakes.

La Oficina del Alguacil del Condado de Martin respondió al llamado de emergencia tras el sorpresivo “bañista” no invitado.

Las oficiales Dawn Ferris y Crystal Nash llegaron al lugar y encontraron al enorme reptil relajado en el agua, completamente indiferente a las miradas curiosas que se asomaban por la verja del patio trasero.

Aunque insólito, este fue el segundo caimán encontrado en una piscina residencial en la misma zona ese mismo día, según informaron las autoridades.

Con la ayuda del profesional Matt Hines, el animal fue retirado de manera segura y sin incidentes.

Las autoridades recordaron a la comunidad que la temporada de apareamiento de caimanes está en pleno apogeo, lo que los hace más activos y propensos a desplazarse fuera de sus hábitats habituales. En este caso, se cree que el caimán trepó o encontró una abertura bajo la cerca para ingresar al patio.

“Se recomienda a residentes y dueños de mascotas mantenerse alerta. Los caimanes son animales salvajes y pueden ser extremadamente peligrosos si se les provoca. Como demuestra su poderosa táctica defensiva conocida como el “giro mortal”, no es seguro intentar remover uno sin la debida capacitación", dijo la Oficina del Alguacil del Condado de Martin.

“Si ve un caimán donde no debería estar, mantenga su distancia y llame a las autoridades“, se advirtió.