Washington - Un ejecutivo petrolero de Texas del equipo de eficiencia gubernamental de Elon Musk ha recibido amplios poderes para reformar el departamento federal que administra vastas extensiones de tierras públicas ricas en recursos, pero no ha desinvertido sus inversiones en energía ni ha presentado un compromiso ético para romper lazos con empresas que representan un conflicto de interés, según los registros.

El secretario del Interior, Doug Burgum, recientemente dirigió a Tyler Hassen, quien carece de confirmación del Senado y no tiene experiencia en administración pública, para reorganizar el Departamento del Interior, que supervisa a unos 70,000 empleados en 11 agencias, incluido el Servicio de Parques Nacionales, la Oficina de Administración de Tierras, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre, la Oficina de Reclamación, el Servicio Geológico de los Estados Unidos y la Oficina de Asuntos Indígenas.

Antes de unirse a DOGE, Hassen pasó casi dos décadas como ejecutivo en Basin Holdings, una empresa involucrada en la fabricación, venta y servicio de plataformas petroleras en todo el mundo. Un informe de divulgación financiera obtenido por AP muestra que Hassen ganó millones anualmente de estas empresas, propiedad de John Fitzgibbons, un gigante de la industria que tiene buenas conexiones en Rusia.

Estos y otros posibles conflictos de interés están agravando las preocupaciones de los legisladores demócratas, los grupos de conservación y los defensores del medio ambiente, quienes dicen que el nombramiento de Hassen parece estar diseñado para evadir la confirmación del Senado y la supervisión, al mismo tiempo que pone a prueba los límites de la autoridad del Congreso.

“Es una negligencia del deber descargar las decisiones sobre la dotación de personal y la financiación en el Departamento del Interior a alguien que ni siquiera ha sido confirmado por el Senado”, dijo Kate Groetzinger, del Centro para Prioridades Occidentales, un grupo de conservación no partidista.

Los funcionarios del Interior no respondieron a las solicitudes para entrevistar a Hassen.

La portavoz del departamento, Katie Martin, dijo en un correo electrónico que Hassen está ayudando a lograr la visión del presidente para cambios importantes, y el Interior “continuará priorizando la retención de los empleados de primeros auxilios, servicios de parques y producción de energía”.

Una vez dentro del Interior en enero, Hassen revisó “cada contrato único, cada subvención única” y envió elementos de acción a Burgum, dijo a FOX News en una entrevista en abril. Burgum elogió a Hassen y DOGE en X, diciendo que “¡ya han identificado cantidades masivas de desperdicio, fraude y abuso!”

Un borrador del nuevo plan estratégico del Interior incluye aumentar “la producción de carbón limpio, petróleo y gas a través de una autorización más rápida”, al mismo tiempo que reduce las regulaciones para “generar más ingresos de las tierras y los recursos para el Tesoro de los Estados Unidos”.

Hassen también ha presentado dos veces un aviso en el Registro Federal extendiendo la congelación de regulaciones de Trump, que impide que las agencias propongan o emitan nuevas reglas, y eliminó la oportunidad de comentarios públicos como “contrario al interés público”. La última extensión la extiende hasta el 4 de junio.

No está claro cómo Hassen se involucró con Musk. Hay poca información sobre él en línea. Le dijo a FOX News que antes de DOGE, estaba “dirigiendo cinco negocios en Houston”. Dijo que este trabajo “es mi forma de retribuir al país”.

Hassen fue ejecutivo de Basin Holdings, propiedad de Fitzgibbons, la empresa matriz privada de Basin Energy y Basin Industries, desde 2008. Una antigua página de Facebook para Tyler Hassen incluye una foto de 2010 de él en el “Campo Samotlor, Siberia Occidental, el campo petrolero más grande de Rusia”.

El hermano de Hassen, Todd, también es un ejecutivo energético de Texas. Ha sido director ejecutivo de Red Wolfpack Resources desde 2024 y estuvo en Tellurian, una empresa de gas natural, y EagleStone Resources antes de eso, según su página de LinkedIn.

Burgum nombró a Hassen su subsecretario de política, gestión y presupuesto en marzo, pero cambió su título en abril a “subsecretario adjunto principal”. Un subsecretario requiere la aprobación del Senado y un compromiso ético para renunciar a los puestos que crearían un conflicto de interés. Un subsecretario adjunto no lo hace.

Kathleen Clark, una experta en ética gubernamental de la Universidad de Washington en St. Louis, dijo que los funcionarios del Interior están cometiendo fraude “al llamar a alguien por un nombre diferente para no tener que presentar un documento realmente importante donde expliquen cómo van a cumplir con las normas éticas”.

Hassen intentó despedir a un abogado principal del departamento en abril por negarse a darle a él y a otros funcionarios de DOGE acceso a una base de datos de personal altamente confidencial mientras presionaba para que se realizaran reducciones masivas de personal en todo el departamento a través de recompras, jubilaciones anticipadas y despidos. Hassen escribió que Tony Irish, un abogado asociado, estaba “subvirtiendo, obstruyendo y retrasando el proceso” y que debería ser despedido por mala conducta.

Irish está de licencia mientras apela el despido y está representado por Empleados Públicos para la Responsabilidad Ambiental. “Al intentar despedir a Tony Irish, Tyler Hassen ha demostrado su propia incapacidad para el servicio federal”, dijo el director ejecutivo de PEER, Tim Whitehouse, en un comunicado de prensa. “Este tipo de acoso corporativo no es la forma en que se supone que se debe llevar a cabo el negocio del pueblo”.

Jacob Malcom, un exejecutivo del Departamento del Interior, dijo que la orden de Burgum que dirige a Hassen a tomar “decisiones de financiación apropiadas” para los cambios administrativos y garantizar “la transferencia apropiada de fondos, programas, registros y propiedades” es inconstitucional: el Congreso asigna fondos, no los subsecretarios.

“A menos que el Congreso haya autorizado explícitamente que esos fondos se trasladen, no pueden realmente transferir los fondos”, dijo Malcom. “Eso es simplemente ilegal”.

Aunque Hassen no presentó un compromiso de desinversión, sí presentó una divulgación financiera en febrero, revisada cinco veces, la más reciente con fecha del 21 de abril, revelando que ganó casi $4 millones anualmente de las empresas de servicios petroleros de Fitzgibbon. Hassen dijo que vendió su participación en estas empresas y que se le está pagando en cuotas hasta junio de 2026.

Hassen informó que posee entre $50,001 y $100,000 en acciones de la empresa de Fitzgibbon, Block Harvest, un negocio de minería de criptomonedas que utiliza gas natural quemado para operar centros de datos. Informó que posee entre $250,000 y $500,000 en acciones de Global Guardian de Fitzgibbon, una empresa de seguridad.

Hassen también declaró 254 participaciones en acciones, incluidas criptomonedas, tabaco, banca extranjera y entre $1,001 y $15,000 en acciones cada una en Archrock, una empresa de Houston que se especializa en servicios de compresión de gas natural; WEC Energy Group, que posee empresas eléctricas y de gas natural, y Quanta Services, que participa en tuberías y bombeo.

Tiene una participación similar en Albemarle Corp., que posee la mina de litio Silver Peak en Nevada, la única fuente de litio activa del país. Actualmente está buscando autorización de la Oficina de Administración de Tierras del Interior para expandir sus operaciones.

Los posibles conflictos de interés de Hassen han generado preocupación entre los grupos ambientalistas y algunos legisladores estadounidenses.

Está intentando eliminar las regulaciones que restringen las industrias de combustibles fósiles, dijo Josh Axelrod, un defensor principal de políticas del Consejo de Defensa de los Recursos Naturales. “Como miembro de esas industrias, está excepcionalmente calificado para señalar las que no les gustan”.

El senador Jeff Merkley de Oregón y la representante Chellie Pingree de Maine, los demócratas de mayor rango en los subcomités de supervisión del Senado y la Cámara de Representantes del Interior, han exigido que se ponga fin a la reorganización a gran escala de Hassen.

El senador Martin Heinrich de Nuevo México le dijo a Burgum en una carta del 7 de mayo que “delegar amplias autoridades y responsabilidades a una persona no confirmada por el Senado en violación de la Ley de Reforma de Vacantes es desconcertante y extremadamente preocupante”.