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La nueva estructura tarifaria de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), cuya propuesta se presentará este viernes, será implementada por fases y la primera de ellas es una tarifa provisional que entraría en vigor en agosto próximo y contempla un aumento de 1.3 centavos por kilovatio-hora (kWh).
La segunda fase es una tarifa permanente que entraría en vigor durante el primer trimestre de 2017 y contempla un aumento de 2.9 centavos por kWh, para un alza total de 4.2 centavos por kWh. La implantación de esta tarifa permanente depende de que la AEE logre, a través de la recién creada Corporación para la Revitalización de la AEE, concretar la emisión de bonos bajo el mecanismo de titulización o “securitization”.
Bajo la nueva estructura, el costo final del kWh aumentaría de 16.19 a 20.01 centavos.
Ambas estructuras fueron aprobadas ayer por la Junta de Gobierno de la AEE y se presentarán a la Comisión de Energía de Puerto Rico (CEPR). En virtud de la Ley 57-2014, conocida como Ley de Transformación y ALIVIO Energético, la CEPR tiene jurisdicción primaria y exclusiva para aprobar las tarifas y los cargos establecidos por la AEE en relación con cualquier servicio de energía eléctrica.
Primer alza
En una presentación exclusiva ante la Junta Editorial de El Nuevo Día, el director ejecutivo de la AEE, Javier Quintana, y la oficial de reestructuración de la corporación pública, Lisa Donahue, aseguraron que la revisión tarifaria propuesta es dos terceras partes más baja que la original.
Ambos atribuyeron la reducción al resultado de las negociaciones con los acreedores de la AEE y las eficiencias operacionales que se han implementado desde septiembre de 2014, cuando Donahue fue contratada.
Para los clientes residenciales, la tarifa provisional representa un aumento de 10%. Para un hogar con un consumo promedio de 800 kWh, el pago mensual subiría de $122 a $133, o sea, $11 adicionales.
Para los clientes comerciales, la tarifa provisional representa un alza de 4%. Para un comercio con un consumo promedio de 1,200 kWh, el pago mensual aumentaría de $219 a $228, es decir, $9 más.
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Para los clientes industriales/comerciales (pequeños), la tarifa provisional representa un alza de 5%. Para una industria/comercio pequeño con un consumo promedio de 91,800 kWh, el pago mensual subiría de $14,287 a $14,972, o sea, $685 extra.
Y para los clientes industriales/comerciales (manufactura), la tarifa provisional representa un alza de 4%. Para una industria/comercio manufacturero con un consumo promedio de 550,800 kWh, el pago mensual aumentaría de $75,721 a $79,049, es decir, $3,328 adicionales.
“Necesitamos cash y por eso es necesario que se apruebe esta tarifa provisional. La AEE no ha pagado su deuda por los pasados 18 meses y necesitamos dinero para cumplir nuestras obligaciones. Esta tarifa provisional nos va a dar liquidez”, manifestó Donahue.
“Estamos confiados en que presentaremos evidencia suficiente para asegurar que se aprueban ambas tarifas. Si la CEPR no aprueba la tarifa provisional, vamos a tener un gran problema”, añadió Quintana.
Segunda alza
Ambos ejecutivos recalcaron que la tarifa permanente no empezaría a cobrarse hasta tanto se complete la emisión de bonos titulizados.
Quintana y Donahue recordaron que el pasado 7 de abril, la Corporación para la Revitalización de la AEE presentó una petición a la CEPR para aprobar la metodología de cálculo de los cargos de titulización. Dicha petición contempla un “cargo de transición” que se estima en 2.99 centavos/kWh para cubrir el servicio de la deuda reducida de la AEE, así como los costos operacionales iniciales y la liquidez para ponerse al día en los pagos para el primer año.
De esta forma, la tarifa permanente representa para los clientes residenciales un aumento de 23%. La tarifa mensual subiría de $122 a $150, es decir, $28 adicionales.
Para los clientes comerciales, la tarifa permanente representa un alza de 24%. Su tarifa mensual se elevaría de $219 a $273, o sea, $54 más.
Para los clientes industriales/comerciales (pequeños), la tarifa permanente supone un incremento de 22%. Su tarifa mensual aumentaría de $14,287 a $17,391, o sea, $3,104 extra.
Y para los clientes industriales/comerciales (manufactura), la tarifa permanente supone un alza de 24%. Su tarifa mensual subiría de $75,721 a $94,453, es decir, $18,732 más.
Subsidio
De acuerdo con Quintana y Donahue, los clientes comerciales e industriales subsidiarán a los residenciales, pues de lo contrario el aumento tarifario sería aún mayor para estos últimos.
Si no se hiciera de esta forma, agregaron, el aumento -en promedio- para los clientes residenciales sería de 60.2% en vez de 28.6%.
Bajo el subsidio, el aumento -en promedio- para los clientes comerciales es de 22.1%, mientras que para los clientes industriales es de 26.2%.
“Cada país decide qué sector va a subsidiar al otro, porque la verdad es que nunca pueden sobrellevar el cargo real. En Puerto Rico, históricamente ha sido el sector residencial el que ha sido subsidiado por los sectores comercial e industrial. Es una cuestión de política pública del Estado Libre Asociado y nosotros no la estamos cambiando”, dijo Quintana.
Inversión
Donahue, entretanto, destacó que tanto los acuerdos con los acreedores como la revisión tarifaria generarían $1,400 millones en ahorros adicionales para la AEE.
Ese dinero supondría una inversión a tres años, que se utilizaría, entre otras cosas, para mejorar la confiabilidad de los sistemas de transmisión y distribución. También sedestinarían fondos para asegurar el cumplimiento de la AEE con los Estándares de Emisión de Mercurio y Tóxicos de Aire (MATS, en inglés) de la Agencia Federal de Protección Ambiental (EPA, en inglés). De paso, la AEE y la EPA trabajan actualmente en la firma de un acuerdo por consentimiento respecto a los MATS.
Los ingresos se usarían, además, para diversificar el uso de combustibles, y para la optimización y construcción de nuevas unidades generatrices.
Sobre esto último, Quintana informó que se prevé construir una nueva planta “en la costa norte”, la cual podría sufragarse con capital privado.
Ante la comisión
Una vez la AEE someta su propuesta de revisión tarifaria este viernes, la CEPR tendría 15 días para evaluar la documentación y decidir si contiene información suficiente y necesaria para iniciar el proceso adjudicativo.
Si la propuesta de la AEE fuese insuficiente, la CEPR la devolvería a la corporación pública con una explicación sobre las enmiendas necesarias. No sería hasta que la AEE complete esas enmiendas que la propuesta se acogería como recibida.
En su momento, la CEPR expresaría mediante resolución el calendario procesal de la revisión tarifaria, que incluiría vistas públicas para que los consumidores puedan opinar y presentar sus preocupaciones respecto a la propuesta de la AEE.
La CEPR tendría 180 días para adjudicar, tras lo cual entraría en vigor la nueva estructura tarifaria.