Tras vivir por 11 años en un hogar de crianza durante su adolescencia, Damaris Cruz conoce, de primera mano, el amor que necesitan niños y jóvenes que son removidos de sus círculos biológicos por maltrato o negligencia y pasan al cuidado del Departamento de la Familia, que tiene 1,316 menores bajo su custodia, sea permanente o provisional.

“Siempre crecí con ese anhelo de crear mi propio hogar de crianza, y no fue hasta tres años atrás que supe del programa ‘Families’ del Grupo SEPI, y me incorporé. Por el proceso que pasé (bajo custodia de Familia), tuve muchos miedos de ser madre, pero hoy día soy madre de seis niños del programa”, dijo la residente en Yabucoa, desde la sede de la organización Servicios Especializados Psicológicos e Integrativos (SEPI), en Santurce.

Al cuidar menores desde edades tempranas hasta la preadolescencia, ha tenido diferentes experiencias, en las que estos temen y desconfían por lo que han sufrido antes de llegar a un hogar temporero o “foster home”.

“Llegan llorando. Muchos de ellos, al día siguiente, me dicen ‘mamá’. Siempre mi meta es que logren adaptarse a nuestro núcleo familiar, y lo logramos el 95% de las veces. Terminan confiando en nosotros”, destacó Cruz, quien participó de los talleres y orientaciones que SEPI convocó este sábado, bajo el lema “Raíces de Amor”.

La psicóloga clínica y presidenta de Grupo SEPI, Amarilis Ramos Rivera, explicó que la actividad fue parte de su reclutamiento de familias para “acoger estos menores en un entorno menos restrictivo y más familiar, para que puedan conocer espacios saludables”.

Como profesionales de la salud, detalló que las familias –a través de la isla– cuentan con terapeutas, enfermeros y trabajadores sociales, entre otros expertos, que visitan los hogares para aconsejarles en el proceso de certificación de un hogar de crianza y ayudarles a trabajar con el trauma y el proceso de ajuste.

Por su parte, la secretaria de la Familia, Suzanne Roig Fuertes, precisó que, en el plan de adopción, se encuentran 206 niños y tienen 706 hogares de crianza licenciados.

“Se requieren hogares especializados para menores con diversidad funcional o altamente traumados por sus lamentables experiencias de vida. Al mismo tiempo, observamos que la cantidad de referidos que concluyen en una custodia provisional no ha cesado, a pesar de la disminución en la natalidad”, indicó la funcionaria, en declaraciones escritas a El Nuevo Día.

Al encuentro entre madres que pertenecen al programa y participantes nuevas, llegaron alrededor de 71 personas, entre ellas, 22 familias interesadas en unirse.

Mientras participaban de la primera dinámica titulada “Lo que el trauma lastima”, Rebecca Vélez Díaz compartió que se interesó en ser parte “de la solución” ante las “lamentables” estadísticas de maltrato infantil en el país.

“No me imagino a mis hijos viviendo eso. Hace tiempo lo tenía en mi corazón, y me motivé a orientarme. Escucho la frase ‘creo en un Puerto Rico mejor’, pero debes quitar el ‘en’, para que sea ‘creo un Puerto Rico mejor’. Eso hace la diferencia”, dijo la también madre de dos universitarios.

En una mesa cercana, participaba de la actividad el matrimonio de Biby Mújica y Oniel Lozada, quienes destacaron que esta sería la primera vez que entran al proceso de certificarse como hogar sustituto, luego de años en busca de poder adoptar.

“Tenemos mucho amor y experiencias para dar. Queremos darle amor, estabilidad, empatía, seguridad, y por qué no hacerlo por ese niño. Darle esa experiencia de que hay gente buena”, dijo Mújica, de 60 años.

“¿Si me encariño, y me lo quitan de nuevo?”, es una de las preguntas que más escuchan en el programa Families, que ya cuenta con 82 hogares de crianza certificados, precisó la directora de programas de SEPI, Mara Liz Gómez.

A la interrogante, Ramos Rivera tiende a responder que “lo más importante de ese proceso es que sepas que tú tienes un compromiso con transformar la vida de ese niño, mientras la tengas en tu hogar”.

Aclaró que, a diferencia de la adopción, un hogar de crianza es “este espacio donde el menor ha sido removido de su hogar biológico, pero no se ha determinado legalmente su situación”.

“No importa que sea un día o cinco años, porque tenemos menores aquí que desde que abrió el programa siguen con nosotros, y no se ha determinado la situación legal por diversas razones, lo importante es saber que el tiempo que esté aquí conmigo, mi compromiso es cambiar su vida”, resaltó la presidenta de Grupo SEPI.

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Las personas interesadas en unirse al programa Families de Grupo SEPI pueden contactarles al (787) 421-3154.