Ciudad Acuña, México - Los sueños de Mackensonn Thelusma, un haitiano de 34 años, son, bien mirados, bastante modestos: estudiar, conseguir un empleo que le produzca algunas satisfacciones y poder encargarse de su familia. Esos sueños, sin embargo, no caben en el desdichado rincón del mundo en el que le tocó nacer.