“12 meses sin ti… Hoy se cumple un año de aquel diciembre que nos cambió la vida".

Con esas palabras, Dyhalmaris Hernández Torres, madre de Eddie Alberto Caraballo Hernández, recuerda la partida de su hijo, uno de los tres jóvenes que perdieron la vida en el trágico accidente de tránsito ocurrido el 5 de diciembre de 2024, en la avenida Alfonso Valdez Cobián, en el pueblo de Mayagüez.

“Quisiera tener la certeza de que algún día no necesitaré escribir para aliviar este dolor, pero creo que mientras te ame, este dolor me visitará. Ya voy aprendiendo a manejarlo: lo siento, lo nombro y lo dejo ir. No le permito quedarse, porque terminaría apagando lo más hermoso, nuestro amor y la mamá de la que viviste orgulloso”, escribió en Facebook.

En la estremecedora publicación, Hernández Torres añadió que aún hay procesos inconclusos que aliviarían la carga del duelo. “Hablar de un cierre sería ironía, porque ¿cómo se cierra un proceso tan doloroso, nacido del amor más puro y hermoso, que son los hijos?”, dijo.

“El cuerpo tiene memoria, y estos días no han sido fáciles. Todavía hay días duros, días en los que aparecen preguntas sin respuestas y quedo doblegada ante el dolor. De lo más doloroso que he vivido este año es no poder salvar a las nenas del sufrimiento. Aunque no se han detenido, no hay nada más desgarrador que ver los hijos sufrir. Aún Amlev te habla, besa tu foto y espera que juegues con él”, dijo Hernández Torres.

“Recuerdo aquel 5 de diciembre. Te dejaron en sala de emergencia, en una camilla junto a todo el que llegaba, como un desconocido, sin identificar. Fue una agonía buscarte porque nadie sabía tu nombre. Solo describirte nos llevó a encontrarte. Irónico que, ante un accidente tan “catastrófico”, te dejaran en un hospital sin los recursos para detener aquel sangrado que arropaba tu único órgano afectado y el más vital: tu cerebro. Y ni hablar de las cinco horas de espera para trasladarte a Centro Médico… o de la ambulancia que se perdió en el camino tomando la salida incorrecta. Cuando por fin te encontramos, nos dijeron que estabas vivo, que solo estabas sedado porque comenzaste a distorsionar. Según la doctora llegaste hablando al hospital. ¿Irónico, no?“, agregó.

La publicación, acompañada de fotografías del joven y de la canción “Confieso” de la cantautora puertorriqueña Kany García, continúa con preguntas que tocan la fibra más profunda del ser humano.

“¿Qué se hace cuando, después de dos horas, aparece una doctora y te dice: “No sé qué pasó aquí”? ¿Acaso yo debía saber? “Su hijo está en estado crítico”. “Hubo un cambio de turno y me encontré con esto”. “Tenemos que trasladarlo a Centro Médico; allá le dirán el procedimiento a seguir””, indicó Hernández Torres.

En sus expresiones, la madre del joven también abordó el diagnóstico que enfrentó su hijo tras el accidente.

“Acudí a mi fe para que no pasara, imploré al cielo sin la respuesta que anhelaba. Como hermana de una experta en el cerebro, sabía que el tiempo se había acabado. Solo podía cantarte “Todo va a estar bien”. Aún hoy me pregunto: ¿quién tiene más posibilidad de vivir en mi país… alguien que necesita servicios médicos en el oeste o alguien que los necesita en el este?“, añadió la madre del joven.

Asimismo, reveló que “el traslado fue una agonía”. “Horas, mientras el tiempo corría y tus posibilidades se apagaban. Solo podía hablarte, pedirte que lucharas, cantarte para que encontraras calma. Te sequé aquella última lágrima sabiendo lo que debiste sufrir al ver a tus hermanos de la vida morir. Sabía que te irías aunque me aferraba a un milagro”, comentó.

Planteó que aún tiene preguntas sin respuesta y sabe que falta camino por recorrer. “Frente al dolor, a lo injusto y lo irónico, decido continuar, amándote de esta nueva forma. Hoy es más real tu ausencia. Ya viene Navidad y aquí seguiremos, juntos, transformando este dolor. Permitiéndome ser abrazada y abrazar, siendo esa puerta de esperanza por la cual trabajamos tanto. Tu legado de amor es lo que me sostiene. Hoy camino de la mano con las preguntas sin respuesta, sin detenerme frente al dolor, en transformación”, dijo.

“Sigo aquí, refugiada en la fe, la familia y el servicio. Abrazada con palabras de esperanza de quienes han transitado este camino de dolor. Pidiéndole al de arriba que nos dé la fuerza para continuar siendo el milagro de aquel diciembre. Te amé, te amo y te amaré… hasta volvernos a encontrar. Tu Reina", puntualizó.

La emotiva publicación cierra con el Salmo 34:18: “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu”.

En el accidente, reportado a las 4:40 a.m. de aquel 5 de diciembre cerca del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico(UPR), murieron José Marti Rivera Rivera, de 22 años, y Josué Elías Rodríguez Arroyo, de 21.

Mientras, Caraballo Hernández, de 21 años, resultó herido de gravedad y fue transportado hasta una institución hospitalaria para recibir asistencia médica. El joven falleció posteriormente en el Centro Médico en Río Piedras, según el informe policíaco.

El vehículo Ford Mustang de 2023 -donde viajaban los jóvenes- era conducido por José Enrique Martínez Rivera, de 21 años, quien enfrenta un proceso judicial por el accidente. Según la Policía, el acusado conducía a exceso de velocidad y con alcohol en su organismo.

En septiembre pasado, Martínez Rivera renunció a la vista preliminar y se allanó a la determinación de causa probable para juicio, que comenzaría en noviembre pasado. El Ministerio Público cuenta con 29 testigos.