

A nivel de Puerto Rico, las plantas generatrices de electricidad que utilizan combustibles fósiles aportan cerca del 30% de las emisiones de gases que causan el efecto invernadero (GEI). El sector de la transportación aporta alrededor del 20% de las emisiones de GEI. Por tal motivo, se le ha adjudicado una alta prioridad a la transformación del sistema de generación de energía eléctrica con combustibles fósiles a un sistema de generación de electricidad a base de energía renovable o alternativa. Además, se le ha adjudicado una alta prioridad al reemplazo de la flota de vehículos de motor que utilizan combustibles fósiles a una flota de vehículos eléctricos.
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