Perfume de gardenias
Vamos a la más reciente película puertorriqueña con el deseo de que sea buena, o al menos mejor que la anterior. Tenemos a nuestro haber algunas buenas películas: Las películas de la División de Educación para la Comunidad deben ser motivo de orgullo. Aunque un amigo me asegurase, con esa mordacidad que a veces usamos para autonegarnos, que ese era cine de “bienestar público”, podemos reconocer en Los peloteros de Jack Delano, con Diplo, lo mismo que en la fotografía de Amílcar Tirado y los guiones de José Luis Vivas Maldonado y Pedro Juan Soto, la posibilidad de un gran cine, atento lo mismo a las vicisitudes de la idiosincrasia nacional como a los grandes cambios sociales que ocurrieron a mediados del siglo pasado. Dios los cría, dirigida por Jacobo Morales, llevó aquel cine de los cincuenta y sesenta-en parte documental y en parte dramático- a nivel de gran arte cinematográfico, la conjunción de gran calidad en las imágenes y personajes bien caracterizados.
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sábado, 6 de agosto de 2022
Un verano sin él
Más que un artista Bad Bunny es un producto, una compleja “marca” … También es la pegatina perfecta de todas las consignas libertarias, escribe Edgardo Rodríguez Juliá
sábado, 9 de julio de 2022
La futilidad
El estatus no es que no esté en issue sino que, por ahora, no es el issue. Y nuestra mediocre clase dirigente debe entenderlo así, escribe Edgardo Rodríguez Juliá
martes, 5 de julio de 2022
Picando alante
Picando alante logra esa ganadora conjunción de lo cómico con lo trágico y sus matices líricos, sentimentales, y hasta tiernos, que bien representan lo más agraciado de nuestra humanidad puertorriqueña, escribe Edgardo Rodríguez Juliá
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El entierro de Cortijo y su juvenil cronista: cuarenta años después
‘El entierro de Cortijo’ es una exaltación de las semblanzas, gestos, voces, poses y presencias de la calle puertorriqueña y antillana; es un libro, sobre todo, de esas actitudes que nos definen. El cronista ha llegado para testimoniarlas, escribe Edgardo Rodríguez Juliá