A edificar un nuevo telescopio en Arecibo
He recibido muchos mensajes personales de condolencia, como si se tratara de la muerte de un ser querido. Es cierto, para muchos la noticia del fin de la operación del Observatorio de Arecibo es como la pérdida de un ser querido. Es un instrumento que produjo gran cantidad de importantes resultados científicos durante su operación desde 1963, incluyendo un Premio Nobel. Es un icono reconocido mundialmente, un símbolo de imaginación y tecnología humana, un centro educacional que inspiró a muchos jóvenes, y un atractivo turístico visitado por millones. Ha sido también un motor económico para la región y lugar de empleo de muchas familias puertorriqueñas. Ahora ha sido sentenciado a muerte.
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