

Sabemos los problemas con el sistema eléctrico del país. En los pasados años, se ha vuelto muy común que el servicio eléctrico sea deficiente, provocando apagones que pueden durar desde varios minutos hasta días sin recuperar el servicio. La falta de electricidad tiene consecuencias importantes que pueden afectar la salud física o mental, teniendo resultados más adversos a la salud de ciertos grupos. Algunos de estos grupos son: adultos mayores, hogares de alojamiento y cuidado para adultos mayores, personas que dependen de otras para completar actividades de la vida diaria, personas susceptibles al calor, personas de escasos recursos y personas que dependen de equipos electrónicos para el cuidado de sus condiciones médicas.
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