Reflexiones de una mascota boricua en Navidad
Soy una mascota casera. Acompaño a hombres y mujeres y niños que me consideran como de la familia. No sé escribir, pero como mi oído es muy superior al humano en intensidad y distancia, le dicté a mi amo la siguiente fábula para que hable por mí y por todas las mascotas, que sufrimos con los explosivos y a veces morimos a causa de sus detonaciones.
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