
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Hace unos meses, próximos a la Navidad, para regocijo de unos y para la incomodidad de otros, repentinamente los vecinos de Miramar escuchan todas las mañanas el cántico repetido de un gallo, que por su tono parece manilo, con una voz ronca, desafinada, no como esos hermosos gallos de pelea que destilan belleza y cantan como el mejor.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: