Para la mayoría de nosotros, la voz juega un papel importante sobre quiénes somos, lo que hacemos y cómo nos comunicamos. Cualquier persona puede llegar a tener un problema de la voz, pero su riesgo es mayor si su trabajo exige gran esfuerzo de sus cuerdas vocales. Por ejemplo, los cantantes, abogados, operadores telefónicos y los maestros tienen trabajos de alto riesgo.