Cada uno de los cuerpos lacerados por el ideario varonil es el reflejo de una sociedad indiferente y permisiva ante la inacción de otros hombres y mujeres, escribe Yvonne Denis Rosario

Es preferible un espacio ocupado por quienes la academia ha descartado al no cumplir con un parámetro cuestionable de competencia, y que tengan acceso a la educación superior, en vez de dejar el aula pública vacía, plantea Yvonne Denis Rosario

Los rostros enmascarados toman dimensiones insospechadas contra cualquier ser humano que asume posturas contrarias. Parece un disfraz que cargan, pero les es inherente, escribe Yvonne Denis Rosario