Nueva York—. Las auroras boreales podrían ser visibles en partes de Estados Unidos el lunes por la noche tras las tormentas solares del fin de semana.

El sol emitió una enorme ráfaga de energía llamada eyección de masa coronal la semana pasada, lo que llevó a los pronosticadores del clima espacial a emitir una rara y severa alerta de tormenta solar el domingo, aunque no fue tan fuerte como el récord del año pasado. Otra dirigida hacia la Tierra el lunes podría producir más avistamientos de auroras.

Las autoridades están monitoreando posibles interrupciones, aunque lo peor ya pasó. Las tormentas del fin de semana pueden haber causado breves interrupciones en la radio de alta frecuencia, dijo Erica Grow Cei, portavoz de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica.

Las auroras podrían ser visibles, especialmente en áreas rurales más oscuras, en Alaska, Washington, Montana, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Minnesota, Michigan, Wisconsin, Maine y partes del norte de Idaho, Wyoming, Iowa, Nueva York, Vermont y Nueva Hampshire.

Esto es lo que hay que saber sobre las auroras y cómo detectarlas.

El sol se encuentra en la fase máxima de su ciclo de actividad de 11 años, lo que hace que las exhibiciones de luz sean más comunes y generalizadas. Las coloridas auroras boreales han decorado los cielos nocturnos en lugares inesperados y los expertos en clima espacial dicen que todavía hay más auroras por venir.

La primavera pasada, la tormenta geomagnética más fuerte en dos décadas azotó la Tierra, produciendo exhibiciones de luz en todo el hemisferio norte. Y el otoño pasado, una poderosa tormenta solar deslumbró a los observadores del cielo lejos del Círculo Polar Ártico cuando aparecieron luces danzantes en lugares inesperados, incluyendo Alemania, el Reino Unido, Nueva Inglaterra y la ciudad de Nueva York.

Las exhibiciones de auroras conocidas como las luces del norte y del sur son comúnmente visibles cerca de los polos, donde las partículas cargadas del sol interactúan con la atmósfera de la Tierra.

Los observadores del cielo están detectando las luces más adentro de Estados Unidos y Europa porque el sol está pasando por un importante cambio de imagen. Cada 11 años, sus polos intercambian lugares, causando giros y enredos magnéticos a lo largo del camino.

Las tormentas severas son capaces de alterar las comunicaciones de radio y GPS.

Se espera que el brote activo del sol dure al menos hasta finales de este año, aunque cuándo alcanzará su punto máximo la actividad solar no se sabrá hasta meses después del hecho, según la NASA y la NOAA.

Las tormentas solares pueden traer más que luces coloridas a la Tierra.

Cuando partículas de rápido movimiento y plasma golpean el campo magnético de la Tierra, pueden interrumpir temporalmente la red eléctrica. El clima espacial también puede interferir con la radio del control del tráfico aéreo y los satélites en órbita.

En 1859, una severa tormenta solar provocó auroras tan al sur como Hawái e incendió las líneas de telégrafo en un evento raro. Y una tormenta solar de 1972 puede haber detonado minas marinas magnéticas de Estados Unidos frente a la costa de Vietnam.

Los expertos en clima espacial no pueden predecir una tormenta solar con meses de anticipación. En cambio, alertan a las partes relevantes para que se preparen en los días previos a que una explosión solar golpee la Tierra.

Los pronósticos de auroras boreales se pueden encontrar en el sitio web del Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA o en una aplicación de pronóstico de auroras.

Considere observar las auroras en un área tranquila y oscura lejos de las luces de la ciudad. Los expertos recomiendan observar el cielo desde un parque local o nacional. Y revise el pronóstico del tiempo porque las nubes pueden cubrir el espectáculo por completo.

Tomar una foto con la cámara de un teléfono inteligente también puede revelar indicios de la aurora que no son visibles a simple vista.

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