Washington D. C. - El presidente Donald Trump dio este viernes una despedida formal al multimillonario Elon Musk, quien concluyó su trabajo oficial como asesor especial y líder de la comisión Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), que en medio del caos puso en marcha recortes en el presupuesto federal.

“Ha trabajado incansablemente en favor de la más abarcadora reforma gubernamental”, dijo el presidente Trump sobre Musk en un evento en el despacho Oval, en momentos en que el multimillonario empresario se desvincula de la comisión DOGE.

Musk donó sobre $275 millones a la campaña de Trump. Su empresa SpaceX mantiene multimillonarios contratos con el gobierno federal, principalmente por medio de las naves espaciales que provee a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA).

Por medio de DOGE, cuya imagen quedó grabada en la presentación de Musk con una motosierra en un evento del grupo conservador CPAC, la administración Trump sostiene que ha eliminado unos $170,000 millones en gastos, desmantelado oficinas como la Agencia Internacional de Desarrollo (USAID), y despedido súbitamente a decenas de miles de empleados federales.

Las iniciativas de DOGE han generado múltiples controversias judiciales que siguen pendientes.

Los recortes presupuestarios han incluido la cancelación o freno de cientos de millones de dólares en asignaciones o subvenciones al gobierno e instituciones de Puerto Rico.

Previo a su despedida en la Casa Blanca, Musk criticó el proyecto republicano de reconciliación fiscal aprobado en la Casa Blanca por entender que tacha los avances que le atribuye a DOGE, al crecer el déficit federal en $2.3 billones (trillions, en inglés).

Musk dijo que aunque regresa con fuerza a sus empresas – Tesla, X, xAI y SpaceX-, espera seguir asesorando informalmente al presidente Trump. Como asesor especial formal del gobierno de Trump sin dejar sus negocios, solo podía trabajar en esa función por 134 días.

Para Musk, “este no es el final de DOGE”.

Aunque se ha quedado corto de su proyección de reducir el gasto federal en al menos $2 billones, Musk confió en que eso se logre más adelante, pues considera una tarea muy difícil ir “línea por línea” del presupuesto.

“Espero seguir siendo un amigo y asesor…asesorar cuando el presidente lo quiera”, indicó Musk.

Trump le regaló una llave simbólica dorada de la Casa Blanca. “Realmente no se va. Creo que (Musk) va a estar yendo y viniendo”, sostuvo el presidente Trump, quien tuvo en el despacho Oval a los secretarios del Tesoro, Scott Bessent, y Comercio, Howard Lutnick.

Musk evitó responder a un reportaje del periódico The New York Times, que sostiene – según allegados-, que al menos durante la campaña de Trump estaba consumiendo drogas con intensidad.

De acuerdo al reportaje, Musk consumía el potente anestésico Ketamina, éxtasis y hongos psicodélicos y “viajaba con una caja de medicación diaria que contenía unas 20 pastillas, incluyendo algunas con la marca del estimulante Adderall, según una foto de la caja y personas que la vieron”.

Musk se ha enfrentado a continuas críticas, incluso después de haber tenido tensiones con miembros del gabinete sobre los despidos, recortes y la integración de miembros de DOGE a departamentos del gobierno.

Las encuestas recientes han reflejado que la opinión pública estadounidense desaprueba el desempeño de Musk, lo que pudo estar salpicando también los negativos de Trump.

La caída de la imagen de Musk se vio incluso en las acciones de su empresa automovilística Tesla, que en el primer cuarto de este año descendieron en un 71%, aunque han recuperado el paso después de que comenzó a alejarse de la administración de Trump.

En los momentos en que las acciones de Tesla caían – y se desarrollaban protestas en Estados Unidos contra la marca, y algunos actos de vandalismo-, Trump mostró en la Casa Blanca varios de los vehículos de la empresa y anunció que iba a adquirir uno, a un costo de $90,000.

A preguntas de periodistas, Musk evitó decir si el obstáculo más fuerte para cumplir con los objetivos de DOGE ha sido el Congreso o el gabinete de Trump.

“Gracias, Elon Musk, por su servicio desinteresado y patriótico a nuestro país”, indicó en la red social X el speaker Mike Johnson (Luisiana), al señalar que “el Congreso está trabajando con la Casa Blanca para codificar los ahorros de DOGE, para frenar el mal uso y el malgasto en el gobierno del dinero de nuestras contribuciones”.