Los Rockies de Colorado anunciaron cambios en el cuerpo técnico y, entre estos, movieron al boricua Andy González a la línea de tercera base.

González llevaba desempeñándose como asistente del coach de bateo de los Rockies desde la temporada de 2022.

González toma la noticia como un ascenso y una responsabilidad más grande.

“Me siento bien contento porque es algo que uno quiere para seguir poco a poco escalando en términos de la profesión de uno. Ahora estoy en una mejor posición”, dijo el coach de 43 años a El Nuevo Día.

“Aquí estamos. Trabajando fuerte, haciendo las cosas que hay que hacer, manteniendo la comunicación. Es una responsabilidad más grande que estar de coach de bateo, pero siento que estoy preparado para el reto, al que entro con confianza y contento de que se me diera la oportunidad de estar en tercera base en las Grandes Ligas”, agregó.

Tradicionalmente, los coaches de banca y de tercera base están en mejor posición para convertirse en dirigentes.

El exjugador del cuadro y ’utility’ también será coach del cuadro interior de los Rockies para el dirigente interino Warren Schaeffer, quien era coach de tercera de los Rockies.

Los Rockies despidieron el domingo a su dirigente Bud Black y nombraron interinamente a Schaeffer hasta el final de la temporada.

Los Rockies tienen la peor marca en las Grandes Ligas con 7-34. Es el único equipo que no ha llegado a doble dígito en victorias.

“Tengo que cambiar la mentalidad de bateo a defensa, porque también estoy encargado de la defensa. No tengo que estar pendiente a los lanzadores del otro equipo, sino a los bateadores y sus tendencia”, sostuvo.

“Como coach de tercera base hay que anticipar, conocer las situaciones de juego, los brazos y cuán atléticos son los jugadores del otro equipo”, dijo González.

González fue seleccionado en la quinta ronda en el sorteo de novatos de 2001 por los White Sox de Chicago. Jugó tres temporadas y 91 partidos en las Mayores con los White Sox, Cleveland y Florida entre 2007 y 2009. Estuvo activo como jugador en el béisbol organizado hasta 2013.

Inició su carrera como entrenador en 2015 en las Menores con los Rockies. En 2022 ascendió al equipo grande como asistente del adiestrador de bateo.

En la liga invernal de Puerto Rico dirigió al RA12, a los Criollos de Caguas, y, más reciente, a los Leones de Ponce, donde también fue coach de banca de Edwin Rodríguez.

Con todo este bagaje, González dijo que está listo para el reto.

“He hecho de todo. Gracias a Dios he tenido la oportunidad de tener varias funciones como coach de primera, de tercera. He sido coach de banco, de bateo y también en los últimos años he estado dirigiendo en Puerto Rico”, dijo González.

“Todo eso me ha ayudado a estar preparado y a tener confianza en uno mismo. Uno hace los ajustes en el camino por más preparado que esté. Llevo 11 temporadas como coach y me he sentido bien”.

Describió a los Rockies como un equipo joven en una de las divisiones más fuertes de las Grandes Ligas. Será una temporada de crecimiento para los jugadores, agregó.

Los Rockies juegan en el Oeste de la Liga Nacional junto a los Dodgers de los Ángeles, los Padres de San Diego, los Diamondbacks de Arizona, y los Giants de San Francisco. Cuatro de los cinco equipos en la División están jugando por encima de .500 en promedio de victorias y derrotas.

“Faltan cinco meses de temporada. Estamos en una división que es la mejor en este momento en las Grandes Ligas. Hay que ver la realidad: tuvimos un mal comienzo y han sucedido cosas que uno no quiere ver. Hay que mantener la cabeza arriba, trabajar”, dijo.

“Ya la organización hizo los cambios que tenía que hacer y ahora todos tenemos que poner de nuestra parte para ayudar al equipo a mejorar. Somos jóvenes. Estamos exigiendo crecimiento. Estos jóvenes están aprendiendo a ser ‘grandesligas’, la rutina, el acercamiento y el plan que conlleva. Tenemos espacio para trabajar con ellos”, dijo.

González agregó que regresar a la dirección de los Leones sigue en sus planes para la temporada 2025-26.

También dijo que ha escuchado rumores de que podría estar con Puerto Rico para el Clásico Mundial de Béisbol 2026.