Alex Cora tuvo muchas razones para celebrar la noche del miércoles en el Fenway Park de sus Red Sox de Boston, aparte de la victoria 10-2 sobre los Rockies de Colorado.

En el festejo de la noche de Puerto Rico que el equipo organizó, dos invitados especiales engalanaron los actos protocolares previo al desafío, muy cercanos al dirigente boricua de los Red Sox.

Es que sus hijos gemelos, Xander e Isander, de siete años de edad, fueron presentados y llamados cerca del montículo del Fenway Park para realizar el tradicional lanzamiento de honor, mientras su famoso papá tuvo la encomienda de recibirles el pitcheo, junto al recordado exantesalista de los Red Sox, Mike Lowell, quien fue compañero de Cora cuando ambos jugaban y es puertorriqueño de nacimiento.

Cora y Lowell fueron parte de la edición de los Red Sox que ganó la Serie Mundial de 2007. Cora era jugador reserva, mientras Lowell resultó Jugador Más Valioso de la Serie Mundial, que Boston le ganó 4-0 precisamente a los Rockies de Colorado.

Los pequeños de Alex fueron presentados de forma especial, cuando el anunciador pronunció por el sistema de sonido del estadio, que el primer lanzamiento sería realizado por los hijos del primer dirigente puertorriqueño en ganar una Serie Mundial, con los propios Red Sox de Boston. Estos hicieron su entrada al terreno luciendo camisetas y gorras de Puerto Rico, con el mismo diseño del uniforme utilizado por el equipo boricua del Clásico Mundial de Béisbol.

El anunciador se refería al 2018, año del debut de Cora como dirigente de Grandes Ligas, cuando se estrenó llevando a su equipo a un récord de la franquicia de 108 victorias de temporada regular, antes de la conquista del título.

Como parte de la celebración Cora también posó para fotos con otros dos puertorriqueños que están activos junto a él como parte de su cuerpo de entrenadores, en la figura de Ramón Vázquez, su coach de banco, y José David Flores, coach de primera base.

Los Red Sox concluyeron la noche con su sexta victoria consecutiva y la octava de los últimos nueve juegos, para colocar su récord en 49-45, todavía en la cuarta posición de la División Este de la Liga Americana, a 5.5 juegos del primer lugar.